Por Gloria Cassano
No basta solo con “ponerse la camiseta” de la empresa. Se necesita algo más que, además de identificarnos nos haga “actuar”: ponernos la camiseta pero jugar.
Una de las competencias que más solicitan las Empresas cuando necesitan incorporar a un nuevo empleado es la de “ponerse la camiseta”. Se entiende por esto la posibilidad de identificarse con la cultura de la organización, sentir como propios los objetivos que se le marcan y, en síntesis, sentir que forman parte de esa Empresa.
Ponerse la camiseta
En principio, las personas tienen facilidad para lograrlo. A la mayoría le gusta pertenecer a una Empresa y, sobretodo, cuando es conocida y reconocida por sus resultados y clima laboral.
Sin embargo, el “ponerse la camiseta” no siempre es sinónimo de mayor eficiencia. Si no estaría todo solucionado.
A ese concepto habría que agregarle el de “Jugar el partido”, que es algo más trascendente. Este nuevo término no significa otra cosa que estar al tanto de lo que pasa, de los problemas que surgen y de estar pensando casi en forma permanente sobre las posibilidades de mejora continua en los procesos y circuitos de la actividad diaria.
Estar en una reunión de amigos discutiendo los beneficios y la calidad de dónde trabajamos al mejor estilo de esa publicidad donde al momento de brindar por los novios un invitado muestra su orgullo de pertenencia a una Importante Empresa, no es suficiente.
En cambio, si tenemos la posibilidad de asociar hechos, escuchar los inconvenientes cotidianos, pensar en ellos, analizar alternativas de solución, estar “adentro del partido” del negocio puede resultar más productivo. Y esto, le pasa a muy poca gente simplemente por entender el trabajo como un medio de recompensa económica para poder vivir de una u otra forma.
Jugar el partido
Cuando “se juega el partido”, los resultados se magnifican, las ideas creativas aparecen y la solución a los problemas se hace más fácil y más rápida. Estar atentos a lo que sucede alrededor aún cuando no pertenezca al sector donde trabajamos y entender el negocio con una visión global es más importante que defender una marca por que sí.
Una Empresa de Correos envió sus tarjetas navideñas “en mano” porque el sector que la mandaba no pertenecía al área de operaciones y quería “asegurarse la llegada”. Evidentemente esas personas no juegan el partido, simplemente hacen su trabajo para cumplir con los objetivos de SU área sin entender que el Negocio es global, que gana la Empresa y ganan los empleados, no sólo en conocimientos sino también en posibilidades de crecimiento en conjunto.
Sólo recordar las empresas que hoy han sido privatizadas donde los Empleados solían responder con un “eso no es mi tema, debe dirigirse a…etc, etc, etc,” sin embargo, esa gente tenía bien puesta la camiseta al punto tal que varias generaciones trabajaron en el mismo organismo. Lo que difícilmente hacía era “jugar el partido” y tratar de resolver los inconveniente de los clientes porque le convenía al negocio.
Entonces, no se trata de “ponerse la camiseta” sino también de “jugar el partido”.
Autora Gloria Cassano