Revista Cultura y Ocio

Ponme un ejemplo – @_vybra

Por De Krakens Y Sirenas @krakensysirenas

Ya ves, me encuentro aquí de nuevo, encharcando con mis lágrimas el suelo.
Sentada, triste, abatida. Escondida tras el mismo cruce de caminos que, al no encontrar salida, me tiene perdida.

Ya ves, me encuentro sola otra vez,
huyendo de un mañana, quizá de un ayer.
Soñando un sueño que no sé si es mío.
Despertando de nuevo a ese demonio que no es recuerdo, pero tampoco olvido.

Demonio:
¿Qué hiciste con mi alma?
¿Dónde guardas nuestro contrato?
Quiero romper esta inválida rutina que nos une y ponerle fin a la apatía.
Quiero cerrar los ojos y verle, sonreírle de nuevo a la vida.

Quiero vivir en su pecho, aunque sea más duro que todos los infiernos.
Quiero morir algún día en sus labios,
y enterrar mi alma en cada uno de sus latidos.
Que esa, solo esa, sea mi condena a cadena perpetua.
Quiero saber cómo él me siente.
Quiero guardar su amor en la memoria de mi mente.
Quiero renacer, quiero tocar, quiero vivir.
Quiero una vida entera junto a él, con cada uno de los problemas que nos toque resolver. Una, que no tenga fin hasta que sean vividos cada uno de los sueños que prometí cumplir.
Quiero mimar, cuidar y respetar. Que amar no sea una promesa ni tampoco una quimera.
Quiero que sonría, joder, yo tan solo quiero amarle y que le den al mundo si él y yo decidimos no formar parte.
¿Tú qué me ofreces? Ponme un ejemplo, maldito demonio, de lo que para ti sería justo pago a cambio de mi alma.
¿Oro? ¿Viajes? ¿Reconocimiento público? ¿Poder?
Eres mal negociante, demonio; ofreces cosas insignificantes para alguien que considera riqueza cada uno de sus detalles. ¿Me puedes dar su risa? ¿Que vuelvan sus gemidos a romper el silencio? ¿Que despierte cada mañana con su aliento acariciando mi amanecer?

¿No puedes? Márchate. No pierdas más tu tiempo en una negociación por mi alma maldita sin sus te quiero.
Márchate de aquí, maldito demonio,
y llévate todo contigo. Llévate tu falsa esperanza y tu maquillada alegría.
Márchate que yo aquí esperaré, sentada y descalza, que la vida cambie el rumbo y que por algún camino venga él, mi única condena. Mi único destino.

Visita el perfil de @_vybra


Volver a la Portada de Logo Paperblog