Por encima de la lluvia - Víctor del Árbol

Hay autores a cuya cita no puedo faltar y Víctor del Árbol, desde que hace ya unos años leí Respirar por la herida, es uno de ellos. Después vinieron La tristeza del Samurái, Un millón de gotas y La víspera de casi todoy siempre espero con ganas, casi con ansia, sus libros y en cuanto se publican no los hago esperar ni un minuto porque sé que los disfrutaré y me harán vivir mil y una emociones. Hoy os hablo de Por encima de la lluvia.

Sinopsis 

Miguel y Helena se conocen en una residencia de ancianos en Tarifa, a una edad en la que creen haberlo vivido todo ya. A Miguel le asusta volar. A Helena le da pánico el mar. Los dos tienen hijos adultos y sienten que les han relegado a un plano casi ornamental. El dramático suicidio de un compañero de la residencia les abre los ojos. No quieren pasar sus últimos días recordando y añorando tiempos supuestamente mejores. Y juntos decidirán emprender el viaje de sus vidas, en el que descubrirán que nada es definitivo mientras queden ilusiones que perseguir.Mientras tanto, en la lejana ciudad sueca de Mälmo, la joven Yasmina, hija de inmigrantes marroquíes y que sueña con ser cantante, vive atrapada entre el cuidado de su autoritario abuelo Abdul y el desprecio de su madre, para quien Yasmina es una vergüenza porque trabaja para un sueco de pasado turbio. Y vive un romance secreto con el subcomisario de la Policía sueca, un hombre mayor e importante.
Estos tres personajes dibujan una historia sobre el sentido del amor y sobre lo extraordinarias que pueden llegar a ser las personas comunes.
Pasado, presente y futuro se entremezclan en este viaje desde Tánger en 1955 hasta Mälmo en 2014, metáfora de un viaje mucho más importante: el de vivir siempre intensamente.

Mi opinión

Miguel, tras una vida dedicada a su trabajo como director de banco, lleva una vida sencilla en su jubilación. A pesar de valerse por sí mismo sin problemas ni la edad ni la enfermedad perdonan y el fantasma del Alzheimer llama a su puerta. Ante la imposibilidad de continuar solo y dado que su relación con su hija Natalia no atraviesa por su mejor momento, decide irse a vivir a una residencia en Tarifa. Allí conocerá a Helena, una anciana también solitaria con la que, a pesar de tener personalidades totalmente opuestas, entablará una entrañable amistad. Lejos de allí, en Malmö, conoceremos a Yasmina, una joven sueca de origen musulmán para la que la vida no es fácil bajo el yugo de una deuda contraída por su abuelo pero que ella debe pagar. Dos tramas muy potentes que lejos de hacerse sombra la una a la otra conviven en perfecta armonía, no restando ni tensión ni ritmo narrativos los saltos que se producen de una a otra.
Desde Tánger a Tarifa, pasando por Malmö, estas dos historias, que en apariencia no guardan relación alguna, corren paralelas en el tiempo y con ellas Víctor del Árbol teje una novela intensa y por momentos desgarradora, en la que un narrador omnisciente será el encargado de desgranar una historia donde se dan cita temas tan complejos como la vejez, la enfermedad, la violencia de género, la inmigración y el auge de la extrema derecha en algunos países. Todos ellos temas delicados que el autor trata con delicadeza y respeto, sin dejarse llevar por lo escabroso, pero sin intentar suavizar tampoco todo su horror. Pero sobre todo, Por encima de la lluvia es una novela sobre las ganas de vivir y sobre el amor. Para ello Víctor del Árbol se vale de tres personajes principales y un amplio elenco de secundarios con los que conquistar al lector. Todos ellos se desvelan ante nuestros ojos, gracias al minucioso trazado realizado, con sus luces y sus sombras, haciéndolos humanos y reales. Al igual que en sus anteriores trabajos el pasado juega un importante papel en el perfil de estos personajes y el dolor que arrastran consigo forman parte de la mochila que deben cargar. Todos los personaje son fantásticos, pero si tengo que quedarme con alguno os confieso desde aquí mi debilidad por Miguel, la ternura que ha llegado a despertar en mí, ha sido tal que en más de una ocasión he tenido que parar la lectura con un nudo en la garganta, respirar profundo para poder continuar.
Como os decía, la vejez y la enfermedad, y la forma de enfrentarse a ellas sin miedos, sin renunciar a los sueños, es en mi opinión el tema principal de una novela que se enfrenta sin complejos y sin paños calientes a la denostada vejez, a esa etapa de la vida que no por ser la final ha de ser conformista o ausente de proyectos, porque la muerte precisamente nos llega en vida, tengamos la edad que tengamos, cuando abandonamos la ilusión y las ganas de perseguir nuestros sueños. Víctor del Árbol nos regala, paseando por el dolor de la vida porque la vida duele, su novela más optimista y esperanzadora. Nos habla de la alegría de vivir y del privilegio de amar y ser amado. De aprovechar el momento, a los quince, a los treinta, a los cuarenta y cinco, pasados los setenta…
Me he sentido como la espectadora privilegiada del viaje físico y vital que Miguel y Elena emprenden. Aún más, he compartido con ellos ese viaje que, sin estridencias y con un ritmo pausado pero constante, me ha permitido disfrutar del estilo impecable del autor, ese estilo que araña al lector con su profundidad y con esa facilidad que parece tener para trasladar con la palabra escrita un mundo de emociones y sentimientos mientras nos encaminamos hasta un desenlace sobrecogedor. Un desenlace emotivo, emocionante, conmovedor y luminoso, con una imagen final que habla más por sí misma que cien mil palabras que se pudieran escribir.
He sufrido en este viaje con Miguel y Helena, no lo voy a negar, las lecturas siempre pueden enfrentarnos a nuestros miedos, a nuestros recuerdos, a aquello que a veces queremos olvidar, que no querríamos haber vivido. Ha sido un viaje por el que he transitado de forma dolorosa porque Por encima de la lluvia duele, pero tras finalizarlo, a pesar de ese dolor, y con los días transcurridos, con la serenidad que otorga la distancia, sé que el mensaje solo puede ser positivo. Sé que mi lectura final solo puede ser levántate, salta, corre, ama, lucha, ¡vive! Porque como bien dice la publicidad de la novela, el viaje más importante es el de vivir intensamente. Siempre.
En definitiva, Por encima de la lluvia es una historia inolvidable. Una novela intensa y desgarradora que ha despertado en mí multitud de emociones a golpe de frases que invitan a la reflexión. Una historia de amor a la vida por encima de derrotas. Una novela narrada con una sensibilidad exquisita y que deja una huella indeleble en mi corazón lector.

Ficha técnica