Revista Cine
Por fin terminó Hickman su megasaga de los 4 Fantásticos
Publicado el 21 noviembre 2012 por Lord_pengallan
Al fin. Casi tres años ha llevado terminar el hype que es la megasaga de Hickman en los 4 Fantásticos. Hemos tenido suerte porque ha ido más rápido que en EE.UU. Estaba deseando quitarme el muerto de encima. Dinero para otras cosas. Qué tostón. Al final ni el viaje ni la llegada han merecido la pena. El trabajo de Hickman no es malo pero es muy mediocre. En ningún momento el guionista (ni los dibujantes, pero eso es culpa de la editorial) ha justificado con calidad que la saga haya sido una megasaga. Tampoco que el tramo final se contase en dos coles simultáneas que contaban lo mismo pero desde otro punto de vista. El ritmo ha sido innecesariamente lento, la historia es irregular, el dibujo -salvo el principio a cargo de Eaglesham- ha sido pobre y tosco, el nº final es basura y el resultado es de lo más tópico y vulgar. Las 30 grapas españolas que ha llevado, muchas -demasiadas- dobles, no merecen la pena. No compensan ni el tiempo, ni el esfuerzo, ni el dinero que han costado, ni el espacio que ocupan en mis estanterías sobrepobladas. Sólo me parecen interesantes las 3 1º. Hacía tiempo que había tirado la toalla pero me esperaba que el final fuese espectacular y revolucionario de algún modo. Por eso me ha parecido tan decepcionante que haya resultado ser uno de los nº más flojos de la megasaga. Pelea entre Galactus y los Celestiales en viñetas pequeñas y con narrativa pésima. Qué les pasaba por la cabeza a Hickman y a Epting? Por qué la he soportado? Pues porque no es mala y tenía un final prefijado que estaba cercano cuando me harté definitivamente del invento. No soy masoquista (y sin espacio y cada vez con menos dinero menos). La cosa se deja de leer y el argumento es bueno, lo malo es el desarrollo lento, la irregularidad (hay muchos nº malos o vacíos), los mediocres dibujos, la infrautilización de casi todo los elementos de la historia (al final no son necesarios ni tantas ciudades, ni tantos personajes, ni tanta mandanga), que más que los 4F la cole se titulaba Reed Richards, la inclusión de Spiderman ($$$), que todo el pescado estuviese vendido mucho antes de terminar la historia, que deshaga cosas interesantes recientemente acaecidas (lo de los inhumanos y los kree), la falta de conexión de una historia tan crucial con el resto de lo que acontecía en el Universo Marvel, la vulgaridad de todo, las numerosas chorradas (cómo Franklin va a tener miedo de tirarse? Es un niño con poderes!) y la nula repercusión de tan magna historia. Al final, como siempre, perro ladrador poco mordedor. Demasiada palabrería. Demasiada paja. El espacio ha excedido con mucho lo que tenía que ofrecer Hickman. Alguna cosa buenas tiene el asunto pero casi se ahogan por falta de aire. La ambición siempre puntúa -sobre todo en un medio industrial, el personaje de Valeria -el más interesante porque es el único que no es plano, bonachón o simple, el personaje de Bentley -creación con potencial que será olvidado porque está obligado a no crecer- y como deja a Muerte (si bien dudo que sea explotado). Poca cosa entre tanta mediocridad. Así pues, la gran historia de Hickman en los 4 Fantásticos es mucho ruido y pocas nueces porque al final es un globo gris demasiado hinchado. No es que lo diga yo, sino que soy otro más que lo dice. La repercusión entre el fandom de esta cosa ha ido disminuyendo con el tiempo hasta el punto de que el final de esta megasaga ha pasado casi totalmente desapercibida. Ahora a reunir fuerzas para sus Vengatas. Espero que Hickman haya aprendido qué no se debe hacer.