Hola a tod@s!!
En los últimos años se han convertido en un cosmético de cabecera.Los mezclamos con la hidratante, los utilizamos para hidratar las puntas del pelo o directamente sobre la piel por la noche para una cura de hidratación.
El poder antioxidante del aceite de argán, el renovador del aceite de rosa mosqueta, el antiaging del aceite de incienso, o el relajante del neroli. Los múltiples usos de los aceites, y su origen natural, hacen que sean unos excelentes aliados para nuestra rutina de belleza facial...
Previenen la irritación causada por algunos ingredientes antiedad como el retinoico.
Lavanda, camomila y argán disminuyen la inflamación.Unas cuantas gotas por la noche serán suficientes para calmar la piel.Previenen la deshidratación de la piel.
A partir de los 30 años, la barrera lipídica natural de nuestra piel empieza a disminuir.
Debido a que los aceites son lipofílicos, son capaces de atravesar la capa lipídica de la piel más rápidamente, consiguiendo una hidratación más efectiva que algunas cremas.Los aceites de oliva y coco son excelentes hidratantes.
Mejoran la absorción del tratamiento posterior.
Si aplicamos unas gotas de aceite antes de nuestra crema antiedad, el aceite hará que las molecúlas como retinol, ácido glicólico o vitamina C penetren más profundamente en la dermis, sin irritar la capa más superficial de la piel.
Son un placer para los sentidos.Su valor en aromaterapia, hace que su aplicación constituya un ritual de belleza y relajación.
Coge una toallita y humedécela en agua un poquito caliente, aplica sobre ella unas cuantas gotas de tu aceite favorito y extiéndela sobre el rostro mientras estás tumbada y haces inspiraciones y espiraciones pausadas...La sensación de relax es fantástica!