Revista Mundo animal
Mantener las uñas de nuestro perro arregladas y con una correcta longitud es muy importante. ¿Por qué debe ser una prioridad para nosotros? Te lo explicamos en esta entrada.Por su salud y bienestar, es importante arreglar las uñas de nuestro amigo con regularidad. Debemos hacerlo con una correcta técnica y acostumbrarlo desde cachorro para que sea cómodo para nosotros y rutinario para él. Es conveniente, también, mantener recortado el pelo de sus patas, pues puede impedir que veamos unas uñas demasiado largas o heridas dolorosas.Si nuestro amigo pasa mucho tiempo al aire libre, y camina sobre diferentes superficies, sus uñas se desgastarán poco a poco y necesitaremos menos sesiones de mantenimiento. Pero hoy en día, con muchos perros urbanos que en ocasiones pasan mucho tiempo en el interior de los hogares, este desgaste es menor.Las uñas largas y descuidadas no solo son poco estéticas sino que, al tocar constantemente con el suelo, ejercen una fuerza de presión y provocan dolor en el dedo al perro. A largo plazo, ello puede modificar la pisada del animal y además caminar y correr puede resultar difícil y doloroso. Esto es especialmente importante en perros mayores, cuya postura puede mejorar drásticamente mediante el arreglo de las uñas.En casos extremos, las uñas demasiado largas pueden curvarse y clavarse en las almohadillas, o romperse incluso. Ambas condiciones resultan sumamente dolorosas.Finalmente, las uñas desatendidas crean un círculo vicioso: debido a que resultan molestas y dolorosas, ello conduce a sesiones desagradables para el perro cada vez que se arreglan, con lo que con el paso del tiempo nos resultará cada vez más difícil el recorte o limado.¿Y cuál es la longitud límite? Sencillo, las uñas no deben hacer contacto con el suelo. Si nosotros al caminar a nuestro perro le oímos, esto significa que las uñas están demasiado largas y deben ser recortadas.Elegiremos siempre el cortauñas adecuado a nuestro perro. Podemos recurrir también al limado con una limas especiales tipo “Dremel”. Es importante, en este caso, acostumbrar a nuestro amigo a su ruido poco a poco. Si se da la situación de que una uña esté rota, demasiado larga o clavada en la almohadilla, debemos acudir rápidamente al veterinario.