justo el día que llegaba el calor (porque anticiparse hubiera sido demasiado pro, como dicen ahora), encendí al aire acondicionado y, ¡oh, sorpresa!, que no se encendió.
sudé en ese momento más de lo que sudaré en todo el verano.
como, además, era sábado por la tarde, porque estas cosas no te pasan un lunes a media mañana con todo el comercio abierto, decidí como buena bloguera, tirar de la web para ver qué podía hacer.
esto es lo que revisé y lo que me salvó:
- los filtros
- el mando
- el diferencial
síganme para más consejos de cocina u otros menesteres.. porque lo que es de esto..
los filtros
¿sabíais que los filtros del #aireacondicionado, no solo existen, sino que se limpian? yo ya sí
abres la tapa de la máquina del aire, y tachán, allí los tienes esperándote polvorientos perdidos.
pasa una aspiradora de mano antes de sacarlos, si no quieres comer más polvo que en el Rocío.
y luego los sacas (salen fácil), y los aclaras con agua. deja que sequen (NO al sol, que se estropean). y los pones de nuevo (entran fácil).
el mando
no llegué a abrirlo del todo para limpiarle los chips por dentro, porque supe que jamás sería capaz de cerrarlo bien de nuevo en cuanto vi los tornillitos, cada uno tiene sus limitaciones y es importante reconocerlas. pero si eres de los que te animas, en youtube hay vídeos varios sobre el tema.
en mi caso bastó con cambiarle las pilas.
el diferencial de la luz
¿lo qué?
el cajetín de clavijas al que acudes cuando «salta la luz».
comprueba que la que corresponde al aire no está off perdida, porque haya saltado durante el invierno sin que te dieras cuenta. en caso de estar off, activar. ése fue mi caso, después de todo.
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