Primark es el gran gigante de la moda irlandesa, presente en toda Europa, expandiéndose a EEUU y que acaba de inaugurar la tienda de ropa más grande de España en la Gran Vía madrileña.
Unos precios casi irrisorios y unos diseños actuales y -en mi opinión- una calidad más que aceptable, hacen de sus prendas un producto objeto de deseo y de compra impulsiva.
Sin embargo, al contrario de la tendencia actual, parece que pase olímpicamente de la venta online. ¿Por qué, si es una actividad que va al alza?
Entre junio y septiembre de 2013 Primark hizo sus pinitos en ecommerce, vendiendo algunos de sus productos en el marketplace Asos. Después de la experiencia de 12 semanas, reafirmó su modelo de negocio de punto de venta físico.
John Bason, director financiero de ABF (Associated British Foods), la empresa matriz de Primark, insiste en que con sus precios no ven viable un servicio de venta online e ilustró el por qué con un ejemplo:
“Piensa en una camiseta de £2. Todo el mundo piensa que es una compra impulsiva, pero un tercio de estas prendas se devuelven. Esto quiere decir que alguien tiene que recogerlas y entregarlas y alguien en el almacén debe recibirlas y volverlas a doblar. No funciona con un rango de precios tan bajo.”
Primark ha pasado de tener 181 tiendas en 2007 a 278 en 2014, no parece un gran incremento, pero sí lo ha sido el aumento en su volumen de facturación: mientras en 2007 vendió sus productos por un valor de £1.600 millones, en 2014 alcanzó los £4.950 millones (unos 6.700 millones de euros).
Así pues, los números reafirman su modelo de negocio y Primark se centra en la estrategia de expansión de sus puntos de venta físicos.
FUENTES:
– Mirror
– The Guardian
Puzzle Bobble
Karate Blazers
Puzzle De Bloques
Magical Cat Adventure