¿Por qué son tan duros los dromedarios?

El dromedario o Camello arábigo, primo hermano del bactriano o camello común, es una de las mejores muestras de la resistencia animal. Originario de Arabia, e introducido en Asia Occidental y África del norte, posee una joroba, a diferencia de su pariente más cercano. Resistente al clima extremo del desierto, su evolución es el perfecto ejemplo de adaptación al medio natural.
Dotado de unas características especificas diseñadas para sobrevivir condiciones, posee entre ellas:
1. Orificios nasales con músculos que les facultan para abrirlos y cerrarlos ante embestidas de tormentas de arena.
2. Pezuñas que se ensanchan al pisar la arena, evitando su hundimiento.
3. Pestañas finas y alargadas para repeler el fino polvo del desierto.
4. Riñones destinados a concentrar la mayor cantidad de orina para evitar la pérdida de agua, de tal manera que la orina se espesa y puede llegar a contener el doble de sal que el agua marina.
5. Alta temperatura corporal, atenuando la diferencia con el exterior, lo que les permite conservar cierta frescura y evitar la temprana sudoración.
6. Pueden elevar la temperatura corporal 6 cº, hasta comenzar a transpirar.
7. Alojan buena parte de la ingesta de alimentos, tras la digestión y en forma de lípidos, en su joroba, la cual se desinfla y cuelga en sus costados una vez vacía. (Debido a ello, sin necesidad de comer subsisten gracias a sus reservas).
8. Tras haber bebido, incluso 150 litros en diez minutos, se permiten distribuir el agua una vez absorbida por el intestino, en su sistema circulatorio (mezclada con la sangre), y no en las jorobas como falsamente se afirmaba, puesto que en ellas únicamente se almacena su soporte calórico.
Todas estas particularidades, les posibilitan para recorrer distancias cercanas a los 50 kilómetros diarios, transportar cargas superiores a 300 kilos y aguantar hasta 10 días sin comer o beber. Nadie resiste más que el Rey del desierto, vehículo por antonomasia de los tuareg y en conclusión, el auténtico rumiante duro de roer.
Cabe resaltar que la tabacalera Camel, no utiliza a un Camello como emblema, sino al Dromedario y su única joroba, hecho que en gran medida, acrecenta la confusión popular entre el número de sus jibas.