Por una ruptura democrática en la UE

Un proceso constituyente supone la elaboración de una nueva Constitución. Eso no supone un cambio automático en la vida de las personas. Pero si es realmente democrático puede contribuir a que se produzcan transformaciones sociales más profundas.

Gerardo Pisarello

Se ha construido una Unión Europea en la que cuando los dos partidos que vienen sustentando mayoritariamente su arquitectura se ponen en entredicho, se pone en cuestión a todos los partidos y la política. La Unión Europea son ellos y sin ellos nada está permitido. Probablemente van a seguir llegando a acuerdos en la comisión europea, como dice Angela Merkel

Quienes cuestionamos este modelo de construcción de una Unión Económica exclusivamente monetaria, económica y financiera somos partidos pequeños incapaces de construir nada, como dice Jáuregui. Se genera una arquitectura compleja, sin explicar su funcionamiento, se aleja la toma de decisiones de las personas para que no puedan participar en un proceso cada vez menos democrático y alejado de quienes se ven más afectados por las decisiones de la Troika. Y luego se utiliza como herramienta legitimadora de las políticas que se hacen a otros niveles como si tuviéramos que tener una fe ciega en el mercado y la UE como principal defensora del sistema capitalista. ¿De dónde surgen esas decisiones? ¿No hay una responsabilidad política entre los partidos que tienen comisarios, como Joaquín Almunia, en la UE?

Quieren terminar con la Esperanza de poder cambiar las cosas que implica ser ciudadano. Hay que reivindicar la construcción de una nueva UE para no ser cómplices de quienes atentan contra nuestras vidas. ¿Acaso los mandados de la troika y la vigilancia del cumplimiento de los planes austericidas no atacan directamente a nuestra sanidad, nuestra educación, nuestro sistema de protección social para los más desfavorecidos?¿Que buscan quienes no quieren oir los lamentos que provocan los recortes y reivindican una fe ciega en la Austeridad feroz que quiere continuar devastando a los de nuestra parte?

Si todo va perfectamente, por qué ocultar el tratado de libre comercio con EEUU, ¿no se fían de la ciudadanía?¿Por qué se oponen a un referéndum donde se pregunte a la gente? Sólo se consulta aquello que tienen claro que sale, tienen una concepción democrática elitista, no quieren participación, ni ciudadanía activa que vea las formas y el fondo de los gobiernos de mayorías absolutas antidemocrática. Sólo súbditos que cada cuatro años avalen sus políticas del desastre, como mal menor.

Repiten los mantras del capitalismo: TINA, there is no alternative, no hay alternativa y hablan del fin de la historia con propuestas incapaces de generar ilusión y se dotan de un discurso apocalíptico que alienta las alas del fascismo. No podemos dejar que la extrema derecha fomente entre los desencantados por el sistema discursos xenófobos, que se achaque a la inmigración el problema del desempleo. Este es una realidad estructural, como la precarización del trabajo, se lleva demasiado tiempo trabajando una normativa laboral a la medida de las necesidades de las grandes empresas.

Hay que hablar de repartir el trabajo, de 35 horas/semanales, de trabajar menos para poder trabajar todos. No habrá salida de la crisis mientras sigan dejando millones de personas en las cunetas, mientra haya 50.000 desahucios al año no hay signo de recuperación que valga, no más dinero en paraísos fiscales, ni Gurteles, ni Bárcenas. Ética, trabajo y a dignificar la política con nuestro compromiso, desde las instituciones y desde nuestros puestos de trabajo.

Ese es nuestra visión de la Unión Europea y Alexis Tsipras nuestro candidato para presidir la Comisión Europea. Solo con el poder de la gente y con las urnas llenas de votos contra la troika podremos conseguirlo. La movilización no es suficiente.