España es el único país del mundo en que se hacen propias las tradiciones de los demás. Quizás esto sea una reacción natural a la española falta de autoestima, fruto de siglos de represión católica.
Sea como fuere, aquí se ha instaurado la remodelada tradición celta de Halloween, el Black Friday, el día de Acción de Gracias, el amigo invisible, y gastar el dinero que no tenemos en cosas que no necesitamos, de modo que las navidades han pasado de ser unos días de recogimiento y vida familiar, a una maldita locura comercial de dos meses. De hecho ya sólo falta alargar un poquito las navidades para conectarlas con el Año Nuevo chino y éste con el “YaEsPrimaveraEnElCorteInglés”, el carnaval por el medio, la semana santa, la feria de abril, el rocío, las comuniones, los finales de curso, la boda de dos amigos, las vacaciones, el comienzo del cole y vuelta a empezar. Algún verdugo en la sala que alivie estos males? No, con el gobierno no me es suficiente, esos son especialistas en muertes lentas y dolorosas.
A mi no me parecería mal que se instaurara la navidad en plan americano. A saber, pegarnos una cena buena a finales de noviembre con la familia que hace tiempo que no vemos, hacer las compras navideñas, y durante 4 semanas, que ya me parecen excesivas, hacer creer a los demás que no somos unos hijos de satanás, poniendo buenas caras y haciendo ver que todo es happy-flower (y eso sin fumar nada especial) y el día de Navidad vovler a ver a la familia para intercambiar los regalos de Papá Noel y felices porque sabemos que tardaremos en verles 11 meses. Se acaba el día de Navidad y cada mochuelo a su olivo a seguir comportándonos como alimañas.
Qué bonito, así no hay que decidir entre los Tres Reyes Magos y Papá Noel, y digo Papá Noel, porque no hay ningún santo cristiano por el medio. Santa Claus, San Nicolas ya no existe, se lo cargó la Coca Cola, ahora celebramos la venida de un gordo de rojo que simboliza el consumismo, y la felicidad a través del único verdadero dios: el dinero.
Está claro no? Los Reyes Magos aúnan unas cuantas cosas que deploro: la religión, algunas tradiciones italianas, y la monarquía. Además de que la fecha está puesta con muy mala uva. Hay que ser muy macabro para que los juguetes que ansían los niños aparezcan un 6 de enero y que no tengan tiempo para jugar con ellos. Seguro que fue idea de algún sádico que disfrutaba diciéndoles a los pequeños de la casa que si no eran bueno durante sus vacaciones navideñas no tendrían los juguetes al final de las mismas. Qué os parecería a vosotros, responsables adultos, recibir la paga extra después de las navidades? A mi bien, porque sería la única forma de conservarla, pero la mayoría lloraría: como los niños sin juguetes. Por eso me parece menos malo Papá Noel, casi al principio de la lotería de navidad las vacaciones de navidad, da los regalos a los niños y éstos disfrutan como tales un par de semanas, destrozándolos desarrollando su creatividad.
Así las cosas que viva el Gordo de Navidad (pero sin retenciones de Hacienda), el Gordo de Coca Cola y los reyes, pues que les den… (regalos de Papá Noel)