El
mundo está conmocionado con el
atentado terrorista a la revista
Charlie Hebdo, (sí, he dicho
atentado terrorista), que ha sacudido a
Francia y a todos aquellos que creen que es importante tener
libertad para
reírse de todo lo que se desea. A mí, particularmente, me parece gravísimo que aún haya gente que mate a alguien porque piense que es lícito
reírse de lo que sea, y creo que si no paramos los pies a todos los que están convencidos de que una
religión o creencia es más importante que la
vida de una persona acabaremos viviendo en una gran mierd... aburrida y llena de gente pestilente adoradora de lo santo y lo devoto. Pienso, además, que no solo debemos parar los pies a este tipo de mal nacidos, sino también a todos los que se empeñan en ponernos el esparadrapo en la boca cada vez que decimos algo que consideran
obsceno o fuera de lugar, a los que piensan que la
vida es un jardín de zarzas en el que todo ha de ser solemne y oscuro, y a los que gustan de llevar una chapa de policía en la camisa para juzgar y señalar con el dedo a todo el que decide no tomarse la
vida con la seriedad que ellos entienden que tiene que tener. ¿Que por qué hemos de parar los pies a todos esos ? Pues porque la
libertad de las personas para tomarse las cosas como quieran es y debe ser un
derecho fundamental. Muchas personas han muerto para conseguir que otros podamos decir o
expresar lo que queremos y deberíamos ser más conscientes de ello de vez en cuando. Yo no pienso tomarme la
vida en serio, lo tengo muy claro, y respeto que otros lo hagan, pero entiendo que no tengo porqué encerrar en un cajón todos los temas que algunos consideran dignos de una seriedad propia de la realeza.
Religión, política, sociedad, enfermedades, adicciones, manías, bodas, rupturas, razas, sexualidad... No importa lo que sea, reivindico el
derecho a que quien quiera ( o pueda, vete tú a saber...) se
ría de lo que desee. Reivindico el
derecho a descojonarn...s de la
vida como ella se descojon... de nosotros cada vez que quiere, porque la
vida hace eso, se
chotea de nosotros. Cada vez que enfermamos porque sí, se
chotea, cada vez que alguien a quien queremos nos abandona cual perros en la carretera, se
chotea, cada vez que nos estafan por ahí, se
chotea, cada vez que un crío mal educado nos hace un corte de mangas y se nos cuela en el autobús, se
chotea... La
vida es una gran capull... con ínfulas que se
ríe de nosotros todo el tiempo y que pone a prueba nuestra paciencia con una insistencia que acojon...
Además,
reírse de todo tiene muchas ventajas, muchas más que inconvenientes. Si eres capaz de
reírte hasta de ti mismo gozas al final de una buena salud, ya que sacas toda tu mala lech.. en forma de chiste y ésta no te enquista el alma, por ejemplo. Si te
ríes de todo, aprendes a relativizar los problemas, y tu capacidad para superar la adversidad crece sin control. Si eres capaz de
reírte de todo, no hay nada que te parezca lo suficientemente poderoso como para aplastarte con su solemnidad, y tu
autoestima se convierte en un arma poderosa con la que puedes pisar a los peores contratiempos. Ser capaz de
reírse de todo y tener la
libertad para hacerlo es fundamental para poder elegir quién se quiere ser y cómo se desea vivir. No hay nada por lo que merezca la pena odiar al prójimo o por lo que merezca la pena matar o esclavizar la voluntad de otros, nada. Así que no os cortéis un pelo y
reíros de algo si eso os alivia.
Reíros de algo si eso os hace sentir más humanos o
libres,
reíros de algo si pensáis que no merece la pena llorar tanto, y si creéis que la humanidad se merece un respiro de vez en cuando.
Reíros como homenaje a esos hombres y mujeres de
Charlie Hebdo, cobardemente asesinados por el simple hecho de creer en la capacidad de
reírse y de hacer
reír desde la más absoluta
libertad de expresión. Que sus muertes no sean en vano...
Espero que allí donde esté siga riendo... Descanse en paz...