La tuberculosis es una enfermedad que se alimenta de la pobreza y de factores sociales como la desnutrición, la vivienda inadecuada y el estigma. En 2021, un total de 2,2 millones de casos de tuberculosis se debieron a la desnutrición en todo el mundo.
Un ensayo llamado RACIONES en la India encontró que proporcionar canastas de alimentos a hogares de adultos con tuberculosis podría prevenir y mitigar la enfermedad. La mejora de la nutrición de los familiares de los pacientes con tuberculosis redujo todas las formas de tuberculosis en casi un 40% y la tuberculosis infecciosa en casi un 50%.
La desnutrición desempeña un papel clave en la tuberculosis dentro de los hogares. El ensayo demostró que aproximadamente la mitad de los pacientes con tuberculosis padecían desnutrición grave.
En el ensayo los pacientes con tuberculosis recibieron una canasta de alimentos de 10 kg al mes, que actuó como vacuna y redujo el riesgo de que los miembros del hogar desarrollaran tuberculosis. La intervención costó 13 dólares por paciente con tuberculosis al mes y 4 dólares por miembro del hogar al mes, y podría realizarse con personal de campo.
Los programas de seguridad social existentes, como los sistemas públicos de distribución, podrían utilizarse para proporcionar raciones de alimentos adicionales a las personas con tuberculosis. En Sudáfrica, donde prevalecen la inseguridad alimentaria y la desnutrición, los beneficios sociales para los pacientes con tuberculosis y sus hogares podrían ayudar a reducir la prevalencia de la tuberculosis.
El mejor tratamiento para los pacientes con tuberculosis es recibir beneficios sociales como un derecho humano básico, además de mejores pruebas, curas y vacunas. Las acciones basadas en evidencia y la distribución de beneficios sociales como una buena alimentación son esenciales para poner fin a la epidemia de tuberculosis.