Retomando los fogones y los buenos hábitos alimenticios os presento hoy una receta típica del pueblo vasco que yo he variado en uno de sus ingredientes base.
La porrusalda es una sopa de puerros con patatas en la que el bacalao le confiere al plato un intenso sabor pero en mi versión he cambiado el pescado por un tipo de seta de la que ya os tengo hablado: la shitake.
La sabiduría popular sostiene que «una cura de puerros vale lo que una cura en Vichy», debido a lo poderosas que son las cualidades diuréticas de esta verdura.
Ingredientes (ecológicos*): dos puerros hermosotes – dos zanahorias – una patata grande o dos medianas – 200 grs. de setas shitake – dos dientes de ajo – pimentón dulce – aceite de oliva – sal – una pizca de harina.
Con las manos en la masa:limpiamos los puerros y los cortamos en rodajas de un centímetro más o menos, pelamos las patatas y las picamos en dados irregulares, por último raspamos y cortamos la zanahoria en rodajas. En la olla exprés (lo hice así en esta ocasión) introducimos estos tres ingredientes y añadimos agua hasta cubrirlos. Mientras en una sartén ponemos un poco de aceite a calentar y echamos el ajo fileteado, cortamos las setas en trocitos y las echamos en la sartén. Cuando estén doradas las retiramos del fuego. A continuación hacemos un sofrito de aceite, el otro diente ajo y pimentón y al final añadimos una pizca de harina espolvoreando desde arriba, revolvemos y retiramos del fuego. Una vez tenemos la sopa de puerros cocida, añadimos las setas y el refrito y salamos al gusto. Dejamos unos diez minutos más a fuego mínimo para que se mezclen bien los sabores y apagamos. Servid bien caliente y saborearéis una porrusalda… a la gallega, para chuparse los dedos!