En un artículo publicado en la revista Scientific Reports investigadores
de la Universidad de Pittsburgh, analizaron cómo la relaxina, (hormona
similar a la insulina) interactúa con los procesos de señalización del cuerpo
para producir un mecanismo fundamental que puede tener un gran potencial
terapéutico. Encontraron que la relaxina regulaba positivamente el canal de
sodio prominente, Nav1.5, en las células del tejido cardíaco a través de un
mecanismo inhibido por el inhibidor de la vía Wnt Dickkopf-1. El aumento de
Nav1.5 se asocia con una mejor señalización eléctrica en el corazón que puede
reducir la susceptibilidad a los trastornos del ritmo cardíaco. Además, la
relaxina también puede revertir la reducción asociada a la edad en las
moléculas de adhesión celular y las proteínas de comunicación célula-célula. En
resumen, la relaxina parece revertir las reducciones problemáticas o la
reorganización patológica de las proteínas de señalización cardíaca vitales. Si
bien estos datos proporcionan una nueva visión de los mecanismos de acción de
la relaxina, se necesita más trabajo para comprender los pasos precisos
necesarios para que la relaxina altere la señalización de Wnt y si se pueden
tomar medidas para alterar directamente la señalización de Wnt para
proporcionar sus efectos beneficiosos.