Paseando por Berlín no resultará difícil toparse con imágenes como las que hoy comparto: las de unos postes totalmente recubiertos por carteles y panfletos, que se superponen como si de las capas de una cebolla se tratase...
Una de dos: o en esta ciudad hay una innegable carencia de postes, o bien se trata de una ciudad en la que hay mucho que decir.
Me sorprende, cuando menos, el que un pueblo con esa fama de ordenados y organizados, permita que se embaracen de tal modo sus farolas...
Berlín es una ciudad pobre, pero sexy(Dicho Popular)