Practica el bronceado inteligente es un hashtag que utilizo en las fichas con consejos que publico en mis redes como #consejosELB. Hace un tiempo publiqué un post con este título basado en un informe de EWG (Enviroment Working Group) y fue entonces cuando se me ocurrió publicar esos consejos para tomar el sol de manera responsable en fichas con mensajes sencillos. La idea es que el mensaje llegue 
No hace falta decir que hoy en día es muy importante salir de casa con la piel protegida por un buen protector solar. Se podría decir que es el cosmético al que se dedica menos atención y es el más importante de todos. No en vano, el sol es uno de los causantes del envejecimiento prematuro de la piel. Si quieres saber el por qué, debes pasarte por el post: Atención al fotoenvejecimiento y a los radicales libres
La potencia de ese protector solar que utilices viene dada por el SPF que son las siglas para decir Sun Protection Factor, o sea, el factor de protección solar contra los rayos UVB. Estas siglas siempre van acompañadas de un numerito y cuanto mayor sea, la protección será mayor. Eso sí, el número únicamente informa del tiempo que le llevaría a la radiación UV del sol quemar tu piel cuando se utiliza el producto, en comparación con el tiempo que tardarías en quemarte sin no lo utilizaras. Pero ojo, solo en condiciones idóneas tanto de nuestra piel como del momento en el que lo estés utilizando. El sudor, un baño en el mar e incluso pasarte la toalla o un pañuelo de papel por la cara para quitarte el sudor o secarte la cara alteran el resultado.
Como no quiero repetirme, si necesitas saber más sobre cómo entender los diferentes SPF y la protección de amplio espectro debes pasarte por el post Cómo tomar el sol de forma saludable.
Pero… ¿Cómo elegir el mejor protector solar?
Bien pues yo creo que lo más importante es tu gusto. Por ejemplo, si tienes la piel tirando a seca pero no te gustan las texturas untuosas, por mucho que te digan que eso es lo que necesitas, vas a estar incómoda. Por eso es mucho más importante que sepas qué te gusta a ti.
No es lo mismo una protección para ir a la playa, en la que a lo mejor aceptas que sea más untuosa, pues si tienes calor está el mar o la piscina cerca para refrescarte. Que si es una protección para llevar todo el día en el trabajo. Tampoco es lo mismo si con esa protección urbana vas o no maquillada. Si tu trabajo es al aire libre o delante de un ordenador, etc, etc, etc. Cada un@ tenemos nuestras circunstancias particulares y, a mi modo de ver, resumirlo todo en el tono y tipo de piel resulta insuficiente.
Creo que es más importante elegir entre una protección química, física o biológica, que afectarán a la textura del producto. (Las diferencias las tienes en el post Como tomar el sol de forma saludable del que ya os he puesto el enlace más arriba)
Tipo de piel, el quid de la cuestión y puedes pensar que es algo muy complicado, pero, en realidad, es muy fácil: si sabes escuchar a tu piel sabrás lo que necesitas.
Una tez grasa, nunca va a querer que le pongas encima nada untuoso. Estas personas elegirán una fórmula sin aceite para sentir la piel confortable.
Las personas con la piel seca les gustará más tener la piel confortable y por eso buscarán una composición más hidratante que contenga humectantes y emolientes.
Una piel sensible preferirá fórmulas que no la alteren más de lo que ya está. Buscarán un producto suave y respetuoso con la dermis que no contenga fragancias químicas, ni parabenos, ni ftalatos para evitar las irritaciones.
Así que además de elegir el valor de SPF, que yo aconsejo sea siempre el más alto, lo único que nos importa después es su textura que será lo que haga que la piel se sienta más o menos confortable.
Este año ya tengo preparado mi arsenal de protectores faciales
Para ir a la playa:
De entre toda la gama, utilizo el que tiene la textura más fluida y aun así me resulta untuosa para mi gusto. En Madrid no tenía problema para utilizarlo en cualquier situación, pero ahora que vivo en la costa, me da mucho calor, por eso solo lo utilizo para ir a la playa.
Como protección urbana:
Proporciona una alta protección y acción antioxidante frente a los rayos UVB/UVA y la luz azul. Textura ultraligera de absorción inmediata que se funde con la piel. Prolonga el bronceado natural y aporta luminosidad y efecto glow.
Como el protector de Bella Aurora me daba calor, quise probar si esta textura Fusion Water de la que habla ISDIN me gustaba. Esta textura me gusta mucho más, lo único que no tiene el poder antimanchas. ¡Qué se le va a hacer! He sido presumida y me lo he comprado con el efecto glow, me encanta como me deja la piel radiante. Al principio me parecía demasiado pero como luego se va fundiendo, lo que queda es una piel preciosa. Me está gustando mucho.
Serum solar de textura transparente que proporciona protección FPS50+ gracias a la combinación de filtros orgánicos UVA y UVB y al complejo activo que protege la piel del daño oxidativo causado por el sol, combinando ingredientes solares de amplio espectro con ingredientes anti-edad y antioxidantes.
Si buscas una protección para cuando vas maquillada, hoy en día hay infinidad de bases con protección solar, pero yo recomiendo que aun así se utilice un protector aparte. La protección la puedes encontrar en formato polvo y utilizarlo para matizar y retocar el maquillaje. En formato aerosol encima del maquillaje, para refrescar al tiempo que se fija. Pero también puedes utilizar un protector de textura ligera (como el de Skin Generics) antes del maquillaje, esperar a que penetre y poner la base. En el post sobre trucos de maquillaje para verano si pasas de los 50, te doy mis trucos favoritos para no pasar calor e ir maquillada.
Para terminar con las texturas, recordar que las leches protectoras tradicionales tienden a ser más espesas que los geles. Las espumas son más fáciles de ver al aplicar, pero contienen más grasa y generan más brillo. Los aerosoles son cómodos de usar, ligeros y se secan rápidamente, pero al no verlos bien cuando los aplicamos, podemos dejar áreas desprotegidas. También pueden ser peligrosos si los inhalas accidentalmente. Sopesa todos los pros y contras y utiliza el que más te guste y se adapte a tus necesidades.
En fin, hasta aquí este post sobre cómo practicar el bronceado inteligente, espero haber dado algunas ideas.
Nos vemos en el próximo post.
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