Si buscas un destino típicamente navideño no te equivocarás con Praga. Prepárate para disfrutar de sus mercadillos de navidad en enclaves excepcionales como el Castillo o la Plaza de la Ciudad Vieja.
La euforia navideña comienza en gran parte de las ciudades europeas la última semana de noviembre, pero este año 2018 Praga no comenzará los festejos hasta el 1 de diciembre, finalizando el 6 de enero de 2019.
Ten esto en cuenta si planeas un recorrido navideño por varias ciudades europeas, para poder cuadrar las fechas de viaje y ver cada una en su máximo apogeo navideño.
Es navidad en Praga
El epicentro de la navidad en Praga se encuentra en su Plaza de la Ciudad Vieja. Un enorme árbol de navidad gobernando la plaza, rodeado de multitud de casetas de madera con tejados rojos y luces navideñas
¡la navidad ya está aquí!
A unos pocos metros, un establo con unos cuantos animales que harán las delicias de los más pequeños.
La visión panorámica desde lo alto de la torre del antiguo ayuntamiento no tiene precio en estas fechas, con los destellos del árbol, los tejados rojos y el frenético discurrir de los visitantes entre los puestos.
En el mercado de navidad podrás comprar adornos para el árbol, juguetes de madera y sobre todo, disfrutar de la gastronomía checa: cerdo asado, salchichas, dulces, vino caliente y cerveza, mucha cerveza.
Los puestos abren de diez a diez y los de comida hasta medianoche.
Mercado navideño en Plaza Wenceslao
En sus casetas de madera se pueden comprar pequeños objetos de cristal de bohemia, juguetes de madera, artesanía en general y adornos navideños. Y no podía faltar otro gran árbol de navidad.
Mercado navideño en el Castillo de Praga
Otro de los mercados se instala en el famoso Castillo de Praga, junto a la Basílica de San Jorge. No dejes de pasar por el callejón del oro y visita el árbol de navidad instalado frente a la Catedral de San Vito.
Mercado de navidad en la Plaza Náměstí Republiky
Si quieres probar una de las sopas de estilo checo o uno de los buenísimos pinchos de patatas fritas en forma de espiral, tienes que pasarte por este mercado de navidad.
No faltan tampoco las salchichas, el trdlnik y el vino caliente. Ojo que se paga al peso, no por plato ¡y a los turistas les sirven raciones abundantes!
¿Cómo se celebra la navidad en Praga?
La noche más importante es la del 24, que se celebra con una gran cena a base de pescado y el correspondiente intercambio de regalos ¡ni rastro de Reyes Magos por aquí!
Para los niños, existe la figura de Mikuláš el 5 de diciembre. Con vistosos ropajes de color rojo, mitra y una larga barba blanca, se acompaña de un angelito y un demonio que visitan las casas de los niños para dejar dulces o carbón, lo que a cada uno corresponda.
Fin de año es una gran fiesta, que se concentra en la Plaza de la Ciudad vieja. Allí reciben al año nuevo frente al Reloj Astronómico, con una cuenta atrás que finaliza en fuegos artificiales.
¿Puedes imaginar qué espectáculo tan inolvidable?
Si ya te has decidido, no dejes la búsqueda de hotel para muy tarde. La ciudad está a tope en esas fechas y los precios suben una barbaridad.
Nosotros estuvimos allí los últimos días del año y casi tuvimos que cambiar de destino, porque los precios eran bastante caros. Al final nos quedamos en el hotel Fortuna Praga, que no está céntrico pero tiene una parada de tranvía justo en la puerta.
El frío es intenso pero nada que no cure una buena cerveza checa o un vasito de vino caliente, acompañando a unas buenas salchichas a la brasa o una ración de Pražská Šunka, el famoso jamón cocido de la zona.
Ya sólo queda abrigarse bien y a disfrutar ¡los recuerdos de la ciudad en navidad quedarán para siempre!
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