Ayer la Princesa de Asturias entregó el premio «Cervantes Chico, que otorga el Ayuntamiento de Alcalá de Henares y la Asociación de Libreros, al escritor Jordi Sierra i Fabra, autor de más de 400 obras de literatura infantil y juvenil con más de diez millones de libros vendidos. El acto se ha celebrado en el Teatro Cervantes de Alcalá de Henares, ante la presencia en el patio de butacas de 258 niños de 44 centros educativos de Alcalá acompañados de profesores y padres. Los escolares fueron los verdaderos protagonistas del acto, por ser los elegidos en sus colegios en reconocimiento a su compañerismo, su solidaridad y su capacidad de trabajo en equipo. Jordi Sierra i Fabra animó a los niños "a vivir la cultura, que no consiste solo en ir al colegio y sacar un cinco, sino en ser curiosos, vivir la vida y ser esponjas". Además animó a los niños a leer y escribir como una de las claves "para aprender a vivir y para ser feliz".
La princesa de Asturias recordó a los niños que Jordi Sierra escribió su primer libro, Las memorias de un perro, cuando solo tenía doce años y que ha creado más de 400 novelas publicadas en medio centenar de países, que ha sido traducido a 25 idiomas, y que lleva vendidos 10 millones de ejemplares. Pero para la princesa Letizia, lo más importante de este escritor es que "lleva sesenta años leyendo", lo que le ha convertido "en un hombre libre y despierto" y en un contador de historias "que nos da gasolina para el alma". La princesa de Asturias recomendó a los niños seguir el ejemplo lector de Jordi Sierra para cerrar su discurso.
El premio ha sido entregado por la princesa Letizia acompañado del ministro de Educación y Cultura, José Ignacio Wert, el alcalde de Alcalá, Javier Bello, la directora general de Bellas Artes, Isabel Rosell, y el presidente de la asociación de Libreros de Alcalá, Manuel Mora. El acto ha sido presentado por Raúl de Pedro, que inició el acto con la lectura de un bello párrafo del libroKafka y la muñeca viajera, una de las últimas obras del autor premiado.