Revista Cultura y Ocio
La tuve cerca, ahí, en el hueco, ese lugar donde sucede lo que no sucede entre las relaciones. Donde se plasma la ilusoria sensación de que uno se está vinculando con alguien. La vi anidar y ahuecar más al hueco, profundizar al hueco. Hacer más vacío al hueco lleno de ella. La premonición. Y supe que antes de hacerlo tenía que pensarlo muy bien. Lo escribí y lo titulé la Cápsula. Quedó a la espera de las certezas que tardaron en llegar y mientras tanto jugueteaba con el relato inconcluso y con la idea de ese estallido, las corridas y la ilusión de que el Colo,el Colito y todos los demás se salvaran, nos salváramos. Pero nunca deja de pasar lo inevitable, aunque la historia fuera otra historia, con un comienzo en un sin algo y terminara en un sin nada. La premonición existió y el estallido reveló la cara de los sin nombre de ese relato inconcluso.