La entrada a la guardería siempre es uno de esos momentos clave tanto para nuestros peques como para nosotros, madres y padres. Sé bien cómo se viven estos instantes: los primeros días llenos de emociones y las incertidumbres que se generan en nuestras mentes. Lo sé en primer lugar como madre que soy, habiendo experimentado esos sentimientos de primera mano. Pero también lo sé como profesional y experta que ha colaborado en diversas escuelas infantiles y ha visto de cerca las diversas transiciones que cada familia atraviesa. Dejar a nuestros pequeños en manos de terceros no es una tarea sencilla, y comprendo la mezcla de emociones que esto conlleva: desde el orgullo por su crecimiento hasta la preocupación por su bienestar.
Es precisamente por esta comprensión profunda que quiero ofrecerte mi apoyo y orientación en este proceso tan importante. He escrito este artículo con el deseo de ayudarte a facilitar esta transición, proporcionando consejos prácticos y estrategias basadas en mi experiencia personal y profesional. Espero sinceramente que estas recomendaciones te sean de gran ayuda y te brinden la tranquilidad que necesitas para afrontar esta nueva etapa con confianza y serenidad.
Qué hacer para preparar la entrada a la guardería de mi hijo
Sobra decir que preparar este momento con tiempo, información y referencias de otras familias nos proporcionará mayor seguridad cuando llegue el gran día.
De esto y cómo organizarnos para que todo fluya con la mayor naturalidad posible es de lo que te hablaré a continuación. De manera que si estás en esta etapa y deseas prepararte para la entrada a la escuela infantil de tu pequeño, sigue conmigo hasta el final porque espero ofrecerte consejos prácticos y sencillos.
Te animo a que los lleves a cabo puesto que hacerlo os puede ayudar que la entrada a la guardería sea lo más tranquila y positiva posible tanto para tu hijo como para ti. Eso sí, ello no quita que al principio sintáis cierto malestar debido a la separación, algo que es absolutamente normal y esperable. Trataros con amor, respeto y aceptación de vuestras emociones.
La preparación para la entrada a la escuela infantil comienza mucho antes del primer día. Tomarse el tiempo para planificar y prepararse adecuadamente puede hacer una gran diferencia en la experiencia de tu hijo. Aquí te presentamos los primeros pasos esenciales para comenzar este importante camino.
1. Busca la Guardería que Mejor se Adapte a tus Necesidades
La elección del centro infantil adecuado es crucial para asegurar que tu hijo tenga una experiencia positiva y enriquecedora. Aquí te dejo con algunas sugerencias para encontrar la guardería que mejor se adapte a tus necesidades.
Evalúa tus Prioridades.
Aunque parezca obvio, lo primero, antes de comenzar tu búsqueda es conveniente que hagas una lista con tus prioridades y necesidades. En esta lista considera todos aquellos factores importantes: la ubicación, el horario, el enfoque educativo, las instalaciones y el costo. Pregúntate qué es lo más importante para ti y para tu hijo en una guardería y ordénalos.
Investiga y Visita Varias Opciones.
Dedica tiempo a investigar diferentes guarderías. Por ejemplo, puedes:
- Visitar sus sitios web, como por ejemplo esta guarderia asturias,
- Leer reseñas en línea.
- Hablar con otros padres sobre sus experiencias, si es posible.
- Programar visitas a varias guarderías para ver las instalaciones en persona, conocer a los cuidadores y observar cómo interactúan con los niños.
Pregunta sobre el Enfoque Educativo
Cada guardería tiene un enfoque educativo diferente. Algunas pueden centrarse en el aprendizaje a través del juego, mientras que otras pueden tener un enfoque más estructurado. Pregunta sobre el currículo y las actividades diarias para asegurarte de que se alinean con tus valores y expectativas.
Observa las Instalaciones y la Seguridad
Durante tus visitas, presta atención a la limpieza, la organización y la seguridad de las instalaciones. Asegúrate de que haya áreas seguras para jugar, materiales educativos adecuados y medidas de seguridad implementadas. No dudes en preguntar sobre los protocolos de seguridad y salud.
Habla con el Personal
Este punto fue muy importante para mi. Y creo sinceramente que conocer a los cuidadores y el personal que trabaja en la escuela infantil es fundamental. No dudes en preguntar sobre su experiencia y cuál es su filosofía educativa. Si tienes ocasión de poder visitar la guardería mientras hay niños en ella, es importante que observa cómo interactúan con los peques y si parecen ser amables, atentos y profesionales. Escucha tu voz interna, si hay algo que te dice que ahí es el lugar … probablemente lo es, y si tienes dudas …lo mejor es que sigas buscando.
Considera la Relación Calidad-Precio
Obviamente el coste es un factor fundamental en la decisión. Cada familia sabe cuál es su presupuesto, por eso es importante que evalúes el costo de la guardería en relación con los servicios y beneficios que ofrece. Asegúrate de que el precio se ajuste a tu presupuesto sin comprometer la calidad del cuidado y la educación que recibirá tu hijo.
Pide Referencias
No dudes en pedir referencias a la guardería. Si puedes, busca hablar con otros padres cuyos hijos asisten o hayan asistido a la misma guardería, sus opiniones pueden ofrecerte una visión más clara y objetiva sobre la calidad del cuidado y la educación que ofrecen.
Reflexiona y Toma una Decisión Informada
Después de visitar varias guarderías y recopilar toda la información necesaria, tómate si es posible tómate un tiempo para reflexionar. Considera todos los aspectos y elige la guardería que mejor se adapte a las necesidades de tu hijo y de tu familia.
Elegir la guardería adecuada puede parecer una tarea abrumadora, pero si dispones de tiempo para realizar una investigación cuidadosa y una planificación meticulosa, podrás encontrar el lugar perfecto donde tu hijo pueda crecer, aprender y disfrutar. Este primer paso es fundamental para asegurar una transición exitosa y una experiencia positiva en la guardería.
2. Despeja incertidumbres en tu pequeño
Tal y como te comentaba al inicio de este artículo, la transición a la guardería puede ser un período de incertidumbre tanto para los niños como para los padres. Establecer hábitos y rutinas puede ayudar a mitigar la ansiedad y preparar a tu hijo para este nuevo entorno. Aquí te ofrezco algunos consejos prácticos para lograrlo.
Habla Abiertamente Sobre la Guardería:
Es evidente que no es lo mismo dejar a un pequeño de 4 meses en la guardería que a uno de 2 años. Sobra decir que con el primero poco podremos decirle para explicarle qué ocurrirá a partir del momento que les dejamos en la guardería. Pero aunque pensemos que no son conscientes de los cambios que se producirán, la verdad es que ellos saben que les dejamos en un lugar extraño, distinto y con personas que no conocen. Es sobre todo sobre los 9 meses, más o menos, cuando aparece el miedo a los extraños y cuando más difícil se hace la separación.
Es importante que tu hijo sepa qué esperar de su nueva guardería. Habla con él sobre lo que es la guardería, quiénes estarán allí y qué tipo de actividades harán. Utiliza un lenguaje sencillo, adaptado a su nivel. Un lenguaje afectuoso y positivo para describir la experiencia es de gran utilidad.
Consejo: Puedes decir algo como: «En la guardería, conocerás nuevos amigos, jugarás con juguetes divertidos y aprenderás muchas cosas nuevas.»
Lee Libros y Ve Videos Educativos:
Otro recurso muy útil son los libros infantiles y los videos sobre la guardería pueden ser herramientas excelentes para ayudar a tu hijo a entender qué esperar. Busca materiales que presenten la guardería de una manera positiva y atractiva.
Consejo: Lee un libro sobre la guardería antes de acostarse para que tu hijo pueda hacer preguntas y expresar cualquier preocupación.
Visita la Guardería con Anticipación:
Antes del primer día oficial, programa una visita a la guardería. Deja que tu hijo explore las instalaciones, juegue con algunos juguetes y conozca a los cuidadores. Esto hará que el entorno le resulte más familiar y acogedor.
Consejo: Durante la visita, puedes decir algo como: «Mira, este es el lugar donde jugarás y aprenderás. ¿Te gusta?«
3. Prepara el Material Necesario
Crea una Lista de Necesidades
Haz una lista de todo lo que tu hijo necesitará para la guardería, como ropa, pañales, biberones y una muda extra de ropa. Asegúrate de tener todo listo antes del primer día.
Etiqueta Todo
Asegúrate de etiquetar todas las pertenencias de tu hijo con su nombre para evitar pérdidas y confusiones. Esto es especialmente importante en una guardería en Asturias, donde muchos niños pueden tener objetos similares.
4. Crea Hábitos y Rutinas
Establece una Rutina Diaria
Lo he dicho en infinidad de ocasiones a lo largo de los años que llevo al frente de Mamá Psicóloga Infantil, las rutinas proporcionan a los niños una sensación de seguridad y predictibilidad. De manera que antes de que comience la guardería, trata de establecer una rutina diaria que incluya horarios regulares para despertarse, comer, jugar y dormir. Puedes encontrar más artículos sobre hábitos y rutinas en Mamá Psicóloga Infantil.
Consejo: Empieza la rutina al menos dos semanas antes de que comience la guardería para que tu hijo tenga tiempo de adaptarse.
Practica Despedidas Cortas
Sobre las despedidas, he dedicado un post completo en este mismo blog que te recomiendo leer si deseas ampliar la información sobre este tema tan importante. Como profesional, he presenciado numerosas despedidas en las escuelas infantiles y he observado cómo los peques lloran sin cesar frente a mamá cuanto más se prolonga la despedida. Como madre, sé que este es un momento muy difícil para ambos y entiendo perfectamente el dolor que nos causa. Al principio, se nos parte el alma cada vez que debemos irnos escuchando los llantos de nuestros pequeños. Pero, de verdad, para ayudar a tu hijo a acostumbrarse a separarse de ti, te recomiendo que pongas en práctica despedidas cortas.
Por qué las Despedidas Cortas Funcionan
Las despedidas prolongadas pueden intensificar la ansiedad de separación tanto para ti como para tu hijo. Los niños perciben nuestras emociones, y si detectan dudas o tristeza, su propio malestar puede aumentar. En cambio, una despedida breve y segura transmite un mensaje de confianza y seguridad.
Consejo: Para comenzar a habituarle, deja a tu hijo con un cuidador o un familiar durante períodos breves y luego ve aumentando gradualmente el tiempo. Esta práctica le ayudará a entender que las separaciones son temporales y que siempre regresarás.
Ejemplo de Despedida Corta: Mantén las despedidas cortas y dulces. Por ejemplo, puedes decir: «Te veré pronto, ¡diviértete!» y luego vete sin prolongar la despedida. Este enfoque no solo minimiza el estrés de la separación, sino que también ayuda a tu hijo a asociar tu partida con una experiencia positiva y breve.
Aunque es natural sentir dolor y preocupación al escuchar los llantos de nuestros pequeños, las despedidas cortas son una estrategia efectiva para facilitar su adaptación a la guardería. Con el tiempo, verás que tu hijo se sentirá más seguro y confiado, lo que hará que el proceso sea mucho más llevadero para ambos.
Crea un Ritual de Despedida
Los rituales de despedida pueden hacer que la separación sea más fácil para tu hijo. Esto puede ser un abrazo especial, un beso, o una frase cariñosa que repitas cada vez que te despidas.
Consejo: Puedes decir: «Hasta luego, cocodrilo» y pedirle a tu hijo que responda: «Después, caimán.» Esto puede convertirse en una tradición reconfortante.
Ajusta los Horarios de Sueño
Asegúrate de que tu hijo tenga un horario de sueño regular y adecuado. Un buen descanso es crucial para que esté de buen humor y listo para enfrentar el día en la guardería.
Consejo: Establece una rutina para la hora de dormir que incluya actividades calmantes como leer un libro o escuchar música suave.
Practica la Autonomía
Fomenta la independencia de tu hijo enseñándole a realizar tareas sencillas por sí mismo, como vestirse, lavarse las manos y comer. Esto le dará confianza y facilitará su adaptación a la guardería.
Consejo: Celebra los logros de tu hijo con elogios y aliento para motivarlo a seguir aprendiendo y haciendo cosas por sí mismo.
5. Tú Eres el Espejo en el que Él se Mira: Mantén una Actitud Positiva
Los niños son extremadamente perceptivos y tienen una capacidad notable para captar y reflejar las emociones de sus padres. Tu actitud y comportamiento pueden tener un impacto significativo en cómo tu hijo se siente con respecto a la guardería. Mantener una actitud positiva y confiada es crucial para ayudar a tu hijo a adaptarse a este nuevo entorno con seguridad y alegría.
Mantén la Calma y la Confianza
Es natural que sientas una mezcla de emociones cuando tu hijo comienza la guardería, desde la ansiedad hasta la tristeza por la separación. Sin embargo, es importante que, frente a tu hijo, te muestres tranquilo y confiado. Tu hijo tomará señales de tu comportamiento y si te ve seguro, será más probable que él también se sienta seguro.
Consejo: Antes del primer día de guardería, practica respiración profunda o cualquier técnica que te ayude a mantener la calma. Cuando hables con tu hijo sobre la guardería, utiliza un tono de voz calmado y positivo.
Ejemplo: Puedes decir algo como: «Sé que la guardería será una experiencia maravillosa para ti. Aprenderás cosas nuevas y harás muchos amigos.»
Habla con Entusiasmo sobre la Guardería
Hablar sobre la guardería de manera entusiasta puede ayudar a tu hijo a sentirse emocionado por la nueva aventura que está a punto de comenzar. Destaca las actividades divertidas y las oportunidades de aprendizaje que tendrá en la guardería.
Consejo: Comparte historias positivas sobre la guardería y menciona actividades específicas que sabes que le gustarán a tu hijo. Puedes incluir ejemplos concretos para hacer la idea más tangible y atractiva para él.
Ejemplo: «¡Estoy tan emocionada por todas las cosas divertidas que harás en la guardería! Podrás jugar con bloques, pintar con tus amigos y escuchar cuentos increíbles.»
Sé Consistente en tus Mensajes
La consistencia en tus mensajes es fundamental para generar una sensación de seguridad en tu hijo. Asegúrate de mantener el mismo tono positivo cada vez que hables sobre la guardería. Evita expresar dudas o preocupaciones frente a tu hijo.
Consejo: Repite afirmaciones positivas sobre la guardería con regularidad. La repetición ayudará a reforzar la idea de que la guardería es un lugar seguro y divertido.
Ejemplo: «Cada día en la guardería es una nueva oportunidad para aprender algo emocionante. Estoy segura de que te va a encantar.»
Mantén la Comunicación Abierta
Permite que tu hijo exprese sus sentimientos y preocupaciones sobre la guardería. Escucha atentamente y valida sus emociones. Reafirma tu apoyo y explícale que es normal sentirse un poco nervioso ante algo nuevo.
Consejo: Dedica tiempo cada día para hablar con tu hijo sobre cómo se siente respecto a la guardería. Utiliza preguntas abiertas para animarlo a compartir sus pensamientos.
Ejemplo: «¿Cómo te sientes acerca de empezar la guardería? ¿Hay algo que te emocione o te preocupe?»
Conclusión
Preparar la entrada a la guardería puede ser un desafío, pero con los pasos adecuados, puedes hacer que esta transición sea mucho más fácil para tu hijo y para ti. Recuerda que cada niño es diferente y puede necesitar más o menos tiempo para adaptarse. Lo más importante es ofrecerle amor, apoyo y paciencia durante este proceso.
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