Preparativos de cumpleaños

Comenzamos una semana llena de ilusión, no es para menos, en estos días mi Rayo cumplirá 6 años, que se dice pronto. Y como toda madre que se precie, me encanta rememorar aquellos días previos a su llegada, aquellas contracciones que ya empezaban a doler, aquella molestia casi placentera en la pelvis, aquellos pinchazos que me hacían saber que todo había comenzado. Aquella fría mañana del 26 de febrero de hace 6 años yo sabía que en breve tendría que irme al hospital y estaba feliz. 
¡Como pasa el tiempo! Ahora tengo a un mozalbete con el comparto charlas, juegos, a quien enseño matemáticas, con quien aprendo música.... Nuestra relación ha cambiado, ya no depende de mi, las bases son otras y me gustan. 
Mañana es un día grande y está nervioso. Como cada año desde que empezó el colegio, llevará un detalle a sus compañeros de clase. Este año será un huevo de pascua con unas chocolatinas dentro. Todo esta listo para ultimar un único detalle. Una de sus amigas de clase es alérgica al cacahuete (con serio peligro para su salud) y al huevo. La pobre siempre se queda sin probar chuches o chocolatinas si eso lleva el cumpleañero del día. Es una niña muy madura, como suele ocurrir en estos casos. Los niños alérgicos son muy conscientes de su problema, pero no dejan de ser niños. 
No hace mucho acudía a una charla que dio Silvia, del blog Mi menú sin leche, sobre este tema. Y aprendí mucho, la verdad. Aprendí sobre todo lo solas que se sienten las familias que tienen hijos con alguna alergia alimentaria. Pero sobre todo me di cuenta de la falta de empatía que tenemos el resto de familias. Las alergias son muy comunes en nuestra sociedad. Pensad en cuántos niños alérgicos puede haber en la clase de vuestros hijos. Seguro que hay uno al menos. Y la cifra va subiendo, año tras año. 
De esa charla que dio Silvia me traje a casa unos chocolates aptos para niños alérgicos, donde además viene una etiqueta especificando claramente: "este producto no contiene trazas de gluten, frutos secos, leche ni huevo". Así que esta chocolatina será perfecta para nuestra niña. Rayo ha participado de la preparación del huevo de pascua de su amiga, y está muy satisfecho. Está al tanto su problema de alergia y ha aprendido una valiosa lección de empatía, compañerismo y amistad. 
Esta tarde preparemos un bizcocho casero de cumpleaños, donde mañana pondremos 6 preciosas velas rojas, su color favorito. Comenzaremos a decorar el salón, guirnaldas con su nombre recortado por él mismo en cartulina, acompañado de la cifra del día: el número 6. No podrá faltar la piñata, chuches, globos, serpentinas, todo vale para arrancar la sonrisa de un niño inmensamente feliz. 
Después de esto el fin de semana está lleno de sorpresas, reuniones, comidas, juegos, tarde de bolos, fiesta con amigos... Mi niño está nervioso, contento, ilusionado, y yo llevo todo el día con una sonrisa tonta en la cara, porque comprendo su felicidad, la comprendo bien porque esa felicidad también es mía. Porque su día es mi día.