El pasado viernes 18 de marzo el poeta ibicenco Ben Clark presentó en Alicante la nueva edición de su libro “Los últimos perros de Shackleton“, publicado por la editorial Sloper. El acto, que tuvo lugar en la librería Phynchon&Co, estuvo presentado por el también poeta y crítico literario, Luis Bagué.
“Los perros de Shackleton comenzaron a ladrar en 2013” explicó Bagué, en un libro que “permite varias lecturas: se puede hacer una interpretación biográfica, leerse como una historia de amor, o bien como un libro de poemas”. Dividido en cinco partes, para Bagué la más sorprendente es la última, destacando el momento en el que los personajes sacan a pasear a los perros.
Tras la presentación, llegó el turno al autor, que quiso comenzar su intervención con los agradecimientos, entre los que incluyó a los miembros del Colectivo Mediterráneo, presentes en el evento, por haberle invitado a participar en la clausura del Encuentro de Arte Mediterráneo Ibiza-Alicante.
Acto seguido, Ben Clark obsequió a los asistentes con la lectura de algunos de sus poemas, tanto de “Los últimos perros de Shacketon” como de su publicación anterior, “La Fiera” (Premio Ciutat de Palma Joan Alcover 2013 y Premio Ojo Crítico de Poesía 2014). Entre los poemas de “Los últimos perros de Shackleton“, Clark recitó “El cazador“, “Revolución” , escrito durante la Primavera Árabe, “un poema muy difícil, porque habla del florecer de los almendros, y hablar de eso es algo increíblemente peligroso”, “Darwin se acerca a Lady Macbeth un sábado por la noche“, “El poeta del puente“, inspirado en la poesía de Juan Antonio González Iglesias, “Rostropovich“, “Difusión simple“, que habla de que “es increíble que estemos vivos y que estemos todos aquí”, y “Mayday“, que contiene numerosas referencias a su afición “inconfesable” por los documentales de accidentes de aviación civil.
De “La fiera“, el autor escogió “21/12/12“, que escribió “por si era el último poema, pero nunca es el último”, “Big bang“, “un poema con cierta ambición cinematográfica”, “La pareja extranjera“, en el que se plantea “lo extraña que es la relación con una persona que no conoces de nada ante una situación de peligro”, y “El embajador“, “un poema muy ibicenco que habla de la isla y lo que significa para algunos viajar representando no sabemos qué”.
Para terminar, Ben Clark eligió “dos poemas perrunos, los dos tristes y distintos”. Se trata de “La hora del paseo” y del último poema del libro, que además, lleva su mismo título, “Los últimos perros de Shackleton“. “Usé ese nombre porque consideré que sería el momento más triste y más duro”, ya que los canes tuvieron que ser sacrificados.
Después de Alicante, la expedición de Shackleton continuará su viaje durante el mes de abril, haciendo escala en Salamanca el día 8. en Plasencia el día 9, en Córdoba el 12, en Madrid el 15, en Ibiza el 21 y finalmente, en Formentera el día 22.