por Christian Pastrana
Crear una empresa va más allá de tener una idea de negocio y querer llevarla a la práctica. Las principales preocupaciones de los emprendedores giran en torno al capital: por un lado, normalmente desconocen cuánto dinero necesitarán para montar su empresa, y por otro, la financiación externa para poder llevar a cabo el proyecto.
Ambos problemas están estrechamente relacionados pues, si logramos definir el presupuesto inicial de la empresa, podremos saber si podremos financiarnos por nosotros mismos o si por el contrario tenemos que recurrir a vías externas como ayudas y subvenciones dirigidas a emprendedores, business angels u otro tipo de inversores.
Antes de llamar a sus puertas es necesario saber cuánto necesitamos para que la idea se haga realidad. Elaborar el presupuesto inicial nos permitirá conocer este dato y decantarnos por una opción u otra de financiación. Pero, ¿qué debo incluir en mi presupuesto?
¿Cómo calculo el presupuesto inicial de mi empresa?
El capital necesario para nuestros primeros pasos como empresarios dependerá de diversos factores: el tipo de empresa, el modelo de negocio a implementar, los recursos para sacarlo adelante…En función de estos parámetros podemos empezar a definir y desglosar nuestro presupuesto, para el que debemos tener en cuenta:
- Gastos de inicio. A la hora de poner en marcha una idea es necesario conocer y analizar el marcado en el que actuaremos. Debes fijar los gastos para realizar estudios e investigaciones de mercado así como de tendencias en el sector para analizar a tu competencia más próxima. Aquí añadiremos otros gastos como viajes para contratar proveedores o para explicar nuestro negocio a futuros clientes, promoción y publicidad…
- Gastos de gestión y organización. En este apartado se incluyen todos aquellos gastos para inscribir a la empresa como sociedad limitada o cooperativa, todas aquellas licencias y permisos legales que requiera la apertura de un negocio de ese tipo, así como otras tareas administrativas en las que necesites ayuda externa: abogados, contables…
- Recursos Humanos y equipamiento. Una vez definido tu plan de negocio, es hora de saber cuántas personas son necesarias en tu equipo y sus respectivos sueldos. Un error muy común entre los emprendedores es intentar hacerse responsable de múltiples y diversas tareas. Aunque cuentes con poco capital es importante contratar aunque sea puntualmente los servicios de profesionales expertos.
Además de los profesionales, tendrás que realizar un inventario de equipamiento para tu empresa: desde ordenadores hasta programas de software así como el alquiler o compra del local y los servicios básicos: teléfono, luz, Internet… - Gastos operativos. Nos referimos a todos aquellos gastos fijos o variables de la empresa. Dentro de los gastos fijos se englobaría el punto anterior: desde las remuneraciones a los empleados hasta todos los equipos técnicos necesarios para el funcionamiento de una empresa. En caso de haber recurrido a financiación externa, aquí deberás añadir el pago a los posibles inversores, organismos o bancos.
Por su parte, los gastos variables están relacionados con el número de ventas que hagas, es decir, son aquellos gastos para la compra y producción de productos o servicios, impuestos por ventas, pago a proveedores o distribuidores… Al no ser fijos, es preferible hacer una estimación anual para no gastarnos más de lo debido.
- Flujo de fondos. Además de todos los gastos y salidas de dinero es importante estimar el porcentaje de ingresos que conseguiremos en un periodo concreto. De este modo, habrá que definir las posibles entradas de capital, o lo que es lo mismo todo el dinero que una empresa ingresa gracias a su actividad o mediante la ventaja de activos, subvenciones…
A partir de estos cinco puntos ya tendrás todas las variables que no deben faltar en el presupuesto inicial de tu compañía. Conocida la cifra total es el momento de ver si tenemos el capital necesario para desarrollarlo o si tenemos que echar mano de ayudas externas.
Y tú, ¿estás pensando en montar un negocio pero te faltan nociones de finanzas? La relación entre este sector y el emprendimiento está muy ligada, por lo que tener conocimientos financieros hará que tu empresa tenga una mayor rentabilidad