Con el estilo tan particular que le caracteriza, Balmain ha presentado en la pasarela de París una colección muy de los años 80, por las hombreras, las cinturas marcadas y los tonos metalizados. Un desfile en el que han predominado los tejidos brillantes, las chaquetas con brocados, el péplum y la superposición de faldas pareo sobre pantalones pitillo. Un desfile en el que la inspiración masculina al igual que los aires retro estuvieron presentes.