Una de las cosas que más ha sorprendido a la opinión pública ha sido la fuerte oposición al proyecto del matrimonio gay en Francia, impulsado por el presidente Hollande.
Asombroso ha sido el hecho de que los homosexuales se unieron a los líderes y activistas
profamilia en la iniciativa. «El derecho de los niños prevalece sobre el derecho a los hijos» fue el eslogan de manifestantes como Jean Marc, alcalde francés que también es homosexual. Aunque Francia es conocida por si actitud laissez faire
hacia el sexo, lo que comenzó como un debate sobre los derechos de los
homosexuales se convirtió en uno sobre el derecho del niño a tener una
madre y un padre, y se disparó la cifra de opositores, que llegó a
incluir aliados insólitos.
Xavier Bongibault, ateo homosexual, es un destacado exponente en
contra del proyecto. «En Francia, el matrimonio no está diseñado para
proteger el amor entre dos personas. El matrimonio francés está
específicamente diseñado para proporcionar familias a los niños», dijo
en una entrevista. «Los estudios más serios realizados hasta ahora... demuestran que un niño tiene problemas cuando es criado por padres homosexuales».
Jean Marc, que vive con un hombre desde hace veinte años, sostiene:
«El movimiento LGBT que habla en los medios... Ellos no me representan.
Como sociedad, no deberíamos estar fomentando esto. No es biológicamente
natural».
Indignado por el proyecto de ley, Jean-Dominique Bunel, especialista
en derecho humanitario de 66 años de edad que efectuó tareas de socorro
en áreas devastadas por la guerra, dijo a Le Figaro que fue
«criado por dos mujeres» y que padeció «la falta de un padre, de una
presencia diaria, de una personalidad y de un ejemplo adecuadamente
masculino, de algún contrapeso para la relación entre mi madre y su
amante. Fui conciente de esto desde muy temprano. Viví esa ausencia de
un padre, la experimenté, como una amputación. En cuanto supe que el gobierno iba a oficializar el matrimonio entre
dos personas del mismo sexo, quedé desconcertado», explicó.
Resultan curiosas algunas
de las razones que esgrimen los homosexuales franceses, que no solo
estarían a favor del matrimonio entre un
hombre y una mujer, sino que también harían campaña en contra del
matrimonio homosexual. Una explicación posible es porque Francia permite
las uniones
civiles para todas las parejas desde hace más de una década. En
cualquier caso, esto podrá servir para proteger los derechos de los
niños, sin perjuicio de nadie.
