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WELLINGTON (Reuters/EP) - La selección de rugby de Nueva Zelanda recibirá el sábado a Sudáfrica en el partido inaugural del torneo Tres Naciones de este año, con las dos potencias del hemisferio sur esperando brindar un espectáculo que tendrá mayor significado del habitual.
Los All Blacks buscarán desesperadamente poner fin a una mala racha de resultados contra los Springboks, luego de haber perdido los tres duelos que disputaron con el campeón del mundo en el Tres Naciones del año pasado.
En términos de historia, ambos equipos tienen el incentivo de lograr un triunfo: Nueva Zelanda no querrá perder un invicto de 21 encuentros en el Eden Park de Auckland que comenzó en 1994, mientras que Sudáfrica no gana en ese estadio desde 1937. Sin embargo, los Springboks han ganado sus últimos dos encuentros en suelo neozelandés, y su margen psicológico estará en lograr una victoria en una sede que el año próximo albergará las semifinales y la final de la Copa Mundial del 2011.
Los All Blacks, que podrían medirse con Sudáfrica en semis el año que viene, son reacios a considerar al partido como guía para el torneo del que serán anfitriones.
"Personalmente pienso que es irrelevante", dijo a periodistas el entrenador asistente de Nueva Zelanda Wayne Smith. "Ambos equipos van a tener un cambio en la Copa Mundial. Pero no hoy o mañana. Es un partido Springboks-All Blacks, con todo lo que eso supone", agregó.
Con la Copa Mundial a un lado, Sudáfrica comienza el torneo, que obviamente incluye a Australia, como favorito a retener el título que logró el año pasado.
Los Springboks cuentan con una serie de jugadores experimentados procedentes del certamen Super 14 que han brindado ritmo e ímpetu a su ya poderosa y pulida línea de delanteros.
De todos modos, el capitán sudafricano, John Smit, admitió que sería difícil defender el título comenzando con dos partidos consecutivos en Nueva Zelanda. "Seguir esperando los mismos resultados y no pensar en que otros equipos nos pueden alcanzar sería ingenuo", advirtió Smit. "Debemos asegurarnos de poder seguir ascendiendo", añadió.
Australia no debutará hasta la tercera jornada, cuando recibirá a los Springboks en Brisbane el 24 de junio, y ese tiempo le servirá para recuperar a varios jugadores que se perdieron los partidos internacionales contra Inglaterra e Irlanda en junio.
Los Wallabies no jugaron bien en esa ventana de "tests" y el entrenador Robbie Deans pidió mayor regularidad a sus dirigidos.
No obstante, el hecho de haber convocado a cuatro debutantes y otros siete con menos de cinco partidos internacionales podría volver a dejar a su equipo en el último lugar del Tres Naciones.
La edición 2011 del torneo se reducirá a dos encuentros contra cada rival para aminorar la cantidad de citas por la expansión del Super 14 a 15 equipos y debido a que la Copa Mundial comienza el 9 de septiembre.
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