Cuando pedí la cita con la matrona en mi CAP (Centro de Atención Primaria), ya me dieron una segunda cita para el tocólogo, exactamente el día que cumplía 8 semanas de embarazo (hace dos días).
Yo tenía entendido que en la Seguridad Social no se hacía ecografía hasta las 12 semanas de embarazo, no obstante, la matrona ya me dijo en su día que en mi cita con el tocólogo me harían una ecografía y me solicitarían los análisis del primer trimestre.
Y así fue.
Llegamos al CAP maridín y yo algo nerviosos. Evidentemente deseábamos volver a escuchar y ver a Bolita, pero no sabíamos exactamente qué íbamos a hacer en esa consulta.
Por otro lado, yo deseaba e imploraba al universo, que no me tocase el subnormal buenorro que dudosamente traspasó mi expediente al departamento de fertilidad en noviembre y cuya llamada sigo esperando.
Por suerte, al entrar en la consulta vi a una ginecóloga jovencísima, amable y cariñosa.
Le entregué el Carnet de Embarazada que me había hecho la matrona en la visita de hace un par de semanas, y enseguida vio que vengo de FIV.
Me llamaba “cariño” todo el tiempo, y me preguntó cuando tenía que dejar la medicación. Le expliqué las pautas que me dieron en la clínica de infertilidad y me dijo que eran correctas. Me pidió que me desvistiera, que me harían una ecografía transvaginal para ver la evolución del embarazo.
¿Será lo que me cuesta a mí despelotarme? Tengo una práctica en colocarme en potros “quepaqué”, y este además, tenía una pierna más subida que otra. Mi posición era de todo menos digna.
Me introdujo el ecógrafo una chica en prácticas y hubo silencio. La ginecóloga soltó un “no veo nada” que casi me mata del susto, pero enseguida dijo “no se lo has metido suficiente, aprieta un poco”.
Y ahí estaba. Bolita en estado berberecho, con un corazoncito que parecía una lucecita y que rápidamente empezamos a escuchar con mucha más potencia que en nuestro primer encuentro.
En ese momento me emocioné. Quería llorar, pero quería estar al 100% para hacerle mis preguntas de rigor. “¿Mide lo que tiene que medir? ¿La frecuencia cardíaca es correcta?”
No sé cuál era la frecuencia cardíaca porque no nos dio ese dato, pero dijo que estaba perfecta, y además, pude reconocer que iba mucho más deprisa que en la ecografía anterior.
Por otro lado, Bolita ya mide 16mm, medida que también nos dijo que era perfecta.
Bajé del potro de la vergüenza y después de vestirme, empezó a darme papeles para que pidiera cita para el cribado del primer trimestre y la dichosa prueba de glucosa (Test O’Sullivan). Tengo este análisis el próximo jueves 14 de mayo, para lo que he necesitado cambiarme el turno en el trabajo, ya que aún no quiero decir nada.
El próximo 5 de junio tengo programada la ecografía de las 12 semanas en la que me dirán los resultados del triple screening.
Para terminar la visita, la ginecóloga me dio muestras de Femibión Pronatal 2 (aunque aún sigo con el 1, en cuanto acabe la caja que tengo que está casi entera pasaré al 2), y otra carpeta diferente. ¿Siempre dan carpetas? Con lo feliz que voy yo con mi plástico de botón :P
Salí muy satisfecha de esta visita, la verdad, pero ahora mismo acabo de caer en que no sé cuando tengo que volver a ver a la matrona, pues esta me dijo de vernos una vez al mes.
Ya os adelanto que este viernes volveré a ver a Bolita porque tengo cita en el privado, e imagino que después ya si que me tocará esperar hasta las 12 semanas para volver a verlo. En cuanto pueda os contaré como ha ido.