Como todo lo que está pasando en este primer año de vida, lo estamos viviendo con mucha pasión, y cada día pasan cosas nuevas.
Matteo ya llevaba unos meses queriendo andar, desde los 10 meses el sillón no tenía secretos para él, iba de un lado a otro sin parar e incluso daba unos pequeños pasitos en el suelo.Ya a los 12 meses iba de un lado para otro de la casa agarrado de una mano y agarrándose por los muebles, incluso se aventuraba a ir de la mesita del salón al sillón, es más, miraba como un aguililla al acecho girando la cara, dejaba unos segundos de preparación y se lanzaba hasta el sillón, después se descojonaba, como diciendo, LO HICE! LO HICE!
Eso sí, nosotros no nos hemos vuelto muy locos con comprarle muchos zapatos al niño, total ¿para que?, si el niño no camina, y ya con los que le iban regalando, iba tirando. Además ir a la zapatería de niños es jodido, porque como tienen una variedad de zapatos increíble, con cámaras de aire, de foam, de pvc, de algodón, con gel, con cordones, sin cordones, con cámara gopro integrada, vamos una pasada, encima como te ven más despistado que un daltónico en un semáforo siempre te vienen a atender, y te dicen -¿que numero tiene el niño de pie? y yo le contesto -Pues lo mismo que sentado, ¿no? es que la gente hace unas preguntas... y me agobio, me agobio...
Total a lo que iba, que las últimas semanas se ha ido soltando en esto del caminar, eso si, Matteo ha puesto unas normas:
-Norma nº 1: Solo lo puedes coger con una mano, y bajo ningún concepto coger las dos manos a la vez, es innegociable, una mano para investigar y otra para agarrarte.-Norma nº 2: Solo cuando el niño quiera, hay que parar de caminar, bajo ningún concepto lo cojas antes de que él quiera, se puede hacer 3 o 4 kilómetros en una mini-casa.-Norma nº 3: Si tengo algún juguete en la mano, mucho mejor, por el contrapeso.
Mucha gente me decía, pero ya tiene 11-12 meses ¿y no va solo?, y yo... no teeengan prisa, que mientras quiera ir agarrado mejor, que lo controlo más, además, el ya daba unos pasos solo pero se acojonaba un poquillo y le gustaba ir de manos, incluso ni se apoyaba en la mano, pero le daba seguridad.
Desde ayer todo esto ha cambiado...
Ayer por la mañana,(me lo contó la aprendiz de madre, que yo estaba haciendo que curraba), tomó decisión y pasito a pasito cruzó toda la casa de una punta a la otra sin tambalearse, y yo -arrrgggggg me lo perdí, jodida conciliación que no existe. Ayer por la tarde vino la Madrina Vane a casa y los dos estaban enralados (palabra canaria que significa: "alegre, contento hasta perder la compostura, relajarse en el comportamiento" vamos todos locos los dos) y también volvió a caminar, con paso firme y decisión, paso a paso, miraba y caminaba ya sin tambalearse, vamos impresionante, no paraba de venirme a la cabeza, "si es que ayer lo vi nacer, ayyy Dios que mañana me pide 50 euros para ir a tomarse unos Gin tonics con los colegas, ayy mama que miedo", que esa es otra, cuando llevaba una hora caminando, seguro que fruto del cansancio, el que parecía que se había tomado los Gin tonics era él, me recordaba a mi hace unos años cuando volvía a casa a las 6 de la mañana, y yo "ese es mi hijo, igualito que su padre"