Su primer disco de bachata se certificó triple platino en Estados Unidos y le mereció nominaciones a los Latin Grammy y los Premios Billboard. Ahora Prince Royce espera superar su propio éxito con “Phase II”, un álbum que mantiene el nivel de romanticismo con “un sonido más pop” y que incluye hasta una fusión con mariachi.
“Es un disco al que he dedicado un año entero”, dijo el cantante neoyorquino de padres dominicanos. “Tuvo tanto éxito el primer álbum que ahora el reto es cómo superar ese éxito con este nuevo material”.
Prince Royce escribió los 13 temas de la producción, que salió a la venta esta semana bajo Atlantic Records y que es mayormente en español; cuenta con una canción en inglés y dos que mezclan ambos idiomas. Entre sus títulos destacan el primer sencillo “Las cosas pequeñas”, así como “Dulce”, dedicada a las adolescentes embarazadas, e “Incondicional”, donde el artista de 22 años se aventura a mezclar el popular género dominicano con el mariachi de México.
“Es algo que nunca se ha hecho en el mundo de la bachata”, dijo orgulloso a la AP el miércoles en una entrevista telefónica.
Prince Royce, cuyo verdadero nombre es Geoffrey Royce Rojas, saltó al estrellato hace dos años con la versión bachata bilingüe del clásico “Stand by Me” de Ben E. King, incluida en su primer disco homónimo, que lo hizo finalista en 12 categorías de los Premios Billboard de la Música Latina, a entregarse el próximo 26 de abril en Miami. Según la revista Billboard, que otorga estos reconocimientos, fue el artista latino con más números uno en 2011.
“No me esperaba ser nominado ni tantas nominaciones porque el año pasado no saqué disco”, dijo el cantante.
“Es un honor y me siento feliz, pero las nominaciones y premios no hacen que me descentre y me lleven a pensar que soy el mejor; estoy empezando todavía y me queda mucho para trabajar”, acotó.
En apenas un par de años Prince Royce ha logrado cumplir el sueño de su adolescencia. A los 14 años empezó a componer y grabar sus propias canciones en su casa en el Bronx, durante el tiempo libre que le dejaba la escuela. A los 18 comenzó a trabajar vendiendo celulares con el fin de costear lo que acabaría siendo su primer disco.
“Lo hacía con la idea de llegar a ser cantante. En vez de salir, me quedaba en casa para escribir y grabar canciones”, relató. “La música me sirve para relajarme, para desahogarme o para alegrarme y eso es lo que quiero para el público”.
Sobre “Dulce”, la canción que escribió a las adolescentes embarazadas, dijo: “He visto a chicas embarazadas desde que estaba en la secundaria. En los conciertos también veo a las jóvenes con sus hijos. Tengo muchas fans que pasan por eso”.
“La canción ‘Dulce’ trata de una chica que está embarazada y no sabe cómo decírselo a sus padres”, prosigue. “Quiero enviar un mensaje positivo para esas chicas que están pasando por eso, para que lo que les pasa no les impida perseguir sus sueño.