Tras la descarga e instalación, la cual es realmente sencilla a través del habitual "siguiente, siguiente", comprobamos que para su funcionamiento es necesario tener instalada la última versión de .Net Framework. Tras la instalación, ejecutamos el cliente y comprobamos que se integra en la barra de tareas del sistema, facilitando el acceso a las opciones que ofrece.
Al realizar la primera ejecución e introducir nuestro usuario y contraseña, el programa entra de forma automática al menú de opciones, donde comprobamos una de las grandes ausencias en este cliente: la sincronización automática de archivos. El cliente permite configurar dicha sincronización cada ciertos intervalos, o bien hacerlo de manera manual, sin la sincronización automática que sí tenemos disponible en Ubuntu.
A pesar de este inconveniente, ejecutamos la sincronización y comprobamos que Ubuntu One se integra de manera perfecta con el navegador de ficheros (de la misma forma que lo hace en Ubuntu), añadiendo su propia carpeta dentro de Mis Documentos, permitiendo así la navegación y extracción e inserción de ficheros de forma sencilla, aunque es precisamente en este punto donde más se echa en falta la sincronización automática, ya que estamos obligados a realizar la sincronización manual o esperar a que el sistema la realice de forma automática, lo cual puede llevar en ocasiones a sincronizaciones incorrectas o incompletas (por cortes eléctricos o apagado del ordenador antes de la finalización). Por otro lado, también se nota la ausencia de unas notificaciones que nos ofrezcan mayor información acerca del progreso de sincronización.
Otras ausencias que encontramos en este cliente son los servicios extra que ofrece Ubuntu One, como las notas, contactos y favoritos, de los cuales no encontramos ni rastro en la aplicación; además de las notificaciones integradas del sistema, las cuales son limitadas, siendo en ocasiones escasas y en otras muy poco claras.
Resulta curioso, por otro lado, ver como Canonical, la cual basa su negocio en Ubuntu en particular y Linux en general, enfrenta antes la creación de un cliente para su servicio UbuntuOne en Windows, mientras que la mayoría de distribuciones Linux aún no disponen de una versión compatible, obligando a usar el servicio web con los inconvenientes que ello implica.
Por último, decir que este cliente, pese a estar aún en fase Beta, cumple perfectamente y sin problemas de funcionamiento con su principal cometido, la sincronización de ficheros, aunque aún le queda mucho por andar para llegar a atender todos los servicios que ofrece UbuntuOne. Podemos encontrar más información sobre la aplicación para Windows, así como sobre los futuros planes que Canonical tiene para ella, en la pagina oficial del cliente, donde se anima a la comunidad a colaborar con el proyecto con reportes de errores y posibles sugerencias.