La integración sensorial es la capacidad de procesar correctamente los estímulos sensoriales de nuestro entorno y generar las respuestas adaptadas que se nos exigen. El Sistema Nervioso Central percibe todas las sensaciones y se encarga de dirigirlas hacia el lugar adecuado para generar las respuestas correctas, es decir:
- Por un lado, cierra el paso a todos aquellos estímulos que no son relevantes para la actividad que estamos realizando. Esto es la inhibición de los estímulos sensoriales.
- Por otro lado, dirige los estímulos hacia el lugar adecuado para que sean procesados de forma correcta e integrados a nivel neurológico. Esto es la organización de los estímulos sensoriales.
Los problemas de aprendizaje pueden estar causados por dificultades de integración sensorial, sin tener relación alguna con niveles intelectuales bajos ni con lesiones neurológicas. El niño que tiene dificultades de integración sensorial puede tener problemas en alguna de las siguientes áreas: lecto-escritura, matemáticas, motricidad.., o en todas ellas. Pero, ¿cómo saber si el niño/a tiene dificultades de integración sensorial como causa de sus problemas de aprendizaje? Muchos son los indicativos que ayudan a padres y maestros a detectar fácilmente el origen del problema:
- No existe ninguna alteración motriz (el niño puede saltar y correr), pero no puede desarrollar acciones motrices complejas o con varios pasos.
- Escucha bien, pero parece que no comprende, le cuesta prestar atención, a pesar de que puede mirar una película o un cuento durante largo rato.
- Tiene reacciones exageradas de miedo ante movimientos habituales en los niños. A veces tiene miedo de ir al colegio.
- Busca el movimiento de forma descontrolada (parece hiperactivo).
- Parece inteligente, pero no logra desempeñar actividades que le corresponden a su edad cronológica.
Fuente Original: Problemas de Integración Sensorial y su Relación con las Dificultades del Aprendizaje