Revista Religión
Los profetas del Antiguo Testamento hablaban del día cuando los judíos regresarían a Israel desde las cuatro esquinas de la Tierra. Años atrás siete judíos chinos fueron recibidos en el aeropuerto Ben Gurión de Israel. Llegaron desde Pekín. Su viaje marcó el fin de cuatro años de lucha burocrática para llegar a Israel, pero también marcó el cumplimiento de una promesa bíblica milenaria.
“Somos testigos del regreso de los exiliados de todos lugares del mundo. Está ocurriendo ante nuestros ojos”, comenta Michael Freund de “Shavei Israel”, una organización dedicada a traer judíos de regreso a Israel.
Según Freund el profeta Zacarías en el capítulo ocho dice cómo Dios promete salvar a su pueblo de los países del Oriente y de los países del Occidente.
La comunidad judía en China se estableció hace más de mil años cuando, según los historiadores, judíos de Persia se mudaron a China. Los ancestros soñaban con volver a Israel, pero ahora un grupo de varones judío provenientes de China está cumpliendo ese sueño. Un sueño que comparten las mujeres judías chinas que inmigraron hace cuatro años.
Zhang Lan, una de las mujeres inmigrantes recuerda que su abuela siempre leía su Biblia en Isaías capítulo 60, donde dice que Hashem, como el águila, traerá de vuelta a su pueblo. “Esa palabra, esas escrituras, siempre venían a mi mente y creo que es verdad”.
Pero estos judíos chinos son sólo un grupo de los que regresan a Israel. Un grupo de judíos de la India, que también regresaron hace poco, representan a los miembros de la tribu perdida de Manasés. Este fue el grupo más grande de ‘Bnei Manasés’ (hijos de Manasés) en regresar a la tierra prometida.
“Hoy es el día más feliz en la historia de Bnei Manasés porque no habíamos tenido un grupo grande como éste regresando”, afirma Allenby Selah miembro del grupo de inmigrantes.
La agencia judía Shavei Israel, cree que la tribu de Manasés se encuentra al noreste de India en los estados de Mizoram y Manipur. Para muchos de ellos, venir a Israel también es un sueño anhelado.
Shavei Israel ha identificado grupos alrededor del mundo, como los “Judíos escondidos” en Polonia, los “Subotnik” de Rusia, los “Bnei Anusim” en España, Portugal y Suramérica, así como los “Bnei Manasés” y los judíos de Kai-feng, China.
Tan pronto llegaron, los chinos fueron al muro occidental en Jerusalén para orar y comenzar su nueva vida en Israel. Los organizadores dicen que son el primer grupo de hombres chinos que se haya mudado a Israel en la historia.
Según los expertos, hay unos dos mil judíos viviendo en China y los organizadores de esta inmigración esperan que más de ellos vengan a Israel. Freund asegura que es una señal de los tiempos. “Dios está reuniendo a su pueblo. Este es un evento no sólo de significado teológico, sino de gran significado histórico también.”
Fuente: Mundo Cristiano