Revista Solidaridad
Que los fuenlabreños con alguna discapacidad física o intelectual tengan una mayor autonomía personal es el objetivo del programa Acompaña2 que el Ayuntamiento de Fuenlabrada pone en marcha.
Se trata de que un voluntario les acompañe en aquellas actividades para las que necesita ayuda, ya sea para su ocio o para la realización de gestiones o trámites.
Desde ir a la piscina, a la biblioteca, al médico o al cine son actividades para las que podrá solicitar de lunes a viernes apoyo de uno de nuestros ciudadanos que voluntariamente colaboran con Servicios Sociales, explica la concejala de Bienestar Social Carmen Bonilla.
Este servicio ya se ofrecía de manera puntual en el Ayuntamiento, pero ahora se trata de que siempre sea la misma persona la que acompaña al discapacitado.
Establecemos así un mayor vínculo en la relación entre ambos indica la edil quien asegura que desde los Servicios Sociales se diseñará un plan personalizado adaptado a cada una de las partes para que ambos se sientan cómodos participando en el programa.
Los discapacitados podrán de esta manera, integrarse mejor en la sociedad, tomando sus propias decisiones y participando en aquellas actividades o iniciativas que deseen sin limitaciones físicas o psíquicas.
En Fuenlabrada en 2011 unas 300 personas se beneficiaron de este servicio de acompañamiento ofrecido por servicios sociales. La concejala responsable, espera que ahora aumente tanto el número de demandantes como el de voluntarios, al ser más completo y organizado.
Los interesados en participar deberán solicitarlo en el Centro de Servicios Sociales del Ayuntamiento (C/ Móstoles 68). http://www.ayto-fuenlabrada.es/index.do?MP=1&MS=12&MN=2&id=3618
Sus últimos artículos
-
Los olímpicos y paralímpicos españoles no vestirán igual porque Joma quería cobrar a los paralímpicos
-
Isidre Esteve: “Llegué a pensar que no volvería al Dakar”
-
Air Europa se niega a pagar la silla que rompió a un tetrapléjico
-
Una madre denuncia la falta de un monitor en el instituto para su hijo con discapacidad