Desborde, regate y habilidad a raudales caracterizan al nipón.
Este joven mediapunta nacido en 2001 ya pasó por las filas inferiores del club azulgrana. Sin embargo, fue uno de los que se vieron obligados a abandonar la Masía debido a la sanción que le impuso la FIFA al Fútbol Club Barcelona por las incorporaciones de jugadores extranjeros demasiado jóvenes.
Ahora, y con apenas 16 años, Kubo ya ha debutado con la selección sub-20 nipona además de haber sido el jugador más joven de la historia en debutar en la máxima categoría del fútbol japonés.
Actualmente, milita en el FC Tokio, aunque el Barcelona ya está moviendo hilos para repescar al futbolista.
No cabe duda que será toda una estrella mediática en pocos años. Ello, unido a su condición de asiático puede tener mucho tirón de merchandaising para el club occidental que cuente con él en un futuro.