Claudio Aldrete y Fernando Rodríguez han presentado una iniciativa de ley en el Congreso del Estado con el objetivo de mejorar las condiciones de movilidad y garantizar la seguridad de todos los usuarios de la vía pública. La propuesta surge de la necesidad urgente de reducir las muertes viales y promover un enfoque de movilidad que priorice a las personas vulnerables, incluyendo a aquellos con discapacidad, los adultos mayores y los niños.
La iniciativa aboga por una movilidad inclusiva y segura, reconociendo la movilidad como un derecho fundamental que facilita el acceso a servicios básicos como la vivienda, la educación, la salud y el empleo digno. Rodríguez enfatiza que nadie debería arriesgar su vida diariamente para ejercer sus derechos, subrayando la importancia de implementar cambios legislativos que han estado pendientes durante demasiado tiempo.
Aldrete señala que el problema de las muertes viales no se soluciona buscando culpables entre los usuarios de la vía, sino exigiendo a las autoridades que adopten decisiones correctas en materia de movilidad. Esto implica promover el desplazamiento a pie, facilitar el acceso a los espacios públicos para las personas con discapacidad y proteger a las infancias en las calles. La ley propuesta busca cambiar el sistema de movilidad actual, que resulta en un alto número de fatalidades.
La cultura vial es otro aspecto crucial abordado por la iniciativa. Rodríguez argumenta que la infraestructura adecuada debe preceder a la cultura vial, ya que la falta de infraestructura adecuada impide el desarrollo de prácticas de conducción seguras. Critica las políticas regresivas, como la eliminación del examen para obtener la licencia de conducir, y subraya que la ley propuesta enfatiza la necesidad de mejorar tanto la infraestructura vial como la sistémica.
Esta propuesta legislativa es un llamado a la acción para todos los ciudadanos y legisladores de San Luis Potosí, motivada por incidentes personales y la pérdida de vidas que han impactado a la comunidad. Aldrete y Rodríguez buscan no solo un cambio legislativo, sino un cambio cultural hacia una movilidad más humana y segura para todos, demostrando que es posible y necesario trabajar juntos para construir una ciudad segura y accesible para cada persona.