El vino es una bebida que, aunque tiene calorías como cualquier otra bebida alcohólica, si se bebe con moderación puede ser buena para la salud, sobre todo si se toma una copa de vino tinto a la hora de la comida. Incluso los médicos lo recomiendan, por las propiedades beneficiosas del vino para la salud, sobre todo si se trata de vino tinto.
Además de sus propiedades digestivas, lo que la hacen una bebida especialmente indicada para las comidas, el vino es un buen tónico debido a los taninos a la vez que es bueno para el equilibrio del sistema nervioso y antidepresivo. Pero sobre todo, de sobras son conocidas sus propiedades beneficiosas para el corazón, tomándose con moderación, por las propiedades contra las causas principales que dan lugar a las enfermedades del corazón como el colesterol malo y la tensión alta, entre otras.
El vino también tiene poder antioxidante, contra las enfermedades cardiovasculares ya que además nivela el colesterol malo, las varices, los calambres musculares, aterosclerosis, cálculos renales, alzheimer, las varices y hemorroides, son buenas contra las alergias y la tensión arterial.
No se debe tomar si se tiene propensión al alcoholismo ni si no se bebe alcohol, ya que como todos sabemos el vino contiene alcohol y los beneficios del vino también se pueden conseguir con la ingesta de uva. Lo ideal es tomar dos copas diarias, no más, ni por sus calorías ni porque se considera necesario, por lo que lo ideal es tomar a la comida y la cena.
Dos copas de vino al día no hacen mal y además tienen buenas propiedades para la salud de la persona que las consume.