El estudio de arquitectura A-cero, dirigido por Joaquín Torres y Rafael Llamazares, presenta las primeras imágenes del proyecto de reforma e interiorismo diseñado para un piso en el norte de la península. La vivienda se ubica en una planta 3 de un edificio residencial y tiene una superficie total aproximada de 250m2.
IMÁGENES ESTADO ACTUAL DE LA VIVIENDA
PROPUESTA DE A-CERO
Se apuesta por un diseño interior caracterizado por el diseño vanguardista de A-cero. Se crean espacios diáfanos y continuos de salón comedor, cocina y un pequeño lavadero. Las estancias de día se conciben como el lugar central de la vivienda desde donde se accede a los dormitorios y cuartos de baño, independizando totalmente el área de día y de noche.
Se apuesta por el blanco absoluto con algún contraste en negro, gris o color fuerte como el rojo. El salón se configura como una zona amplia y diáfana en la que no existen barreras al espacio total. Se elige una iluminación lineal con leds y muebles lacados en blanco.
Ocupando todo el lateral, un gran ventanal con acceso a la terraza. Este ventanal permite la entrada total de luz natural aportando más luminosidad si cabe al estilo total white por el que se apuesta en esta propuesta.
El color blanco da sensación de amplitud a cualquier estancia, todo esto, acentuado por la luz, tanto artificial como natural, nos traslada a un espacio de confort y tranquilidad que se respira en toda la vivienda.
El dormitorio principal también tiene como color predominante el blanco, sin embargo, hemos querido colocar un gran cabecero formado por un lienzo en tonos rojos, obra original de Joaquín Torres y Rafael Llamazares. Esto crea un contraste con el blanco que resalta cada pieza y parte del mobiliario y del conjunto.
El dormitorio en suite cuenta con un gran vestidor, con multitud de armarios. Otra vez volvemos a ver cómo el blanco nos da la amplitud necesaria para estancias como esta, intensificado por la luz natural que entra a través de un ventanal.
El baño en tonos blancos, acentúa la sensación de limpieza y confort con un suelo tarima en tono gris claro. La mampara de cristal “amplía” el espacio total de la estancia.