La programación tangible es una pequeña gran revolución. Básicamente consiste en un método de programación mediante objetos que se pueden ver y tocar. Cada uno de estos objetos tienen características propias (clases) y funciones diferentes. La combinación de estos objetos genera nuestro programa que podemos modificar, compartir y mejorar con otros usuarios. Es algo así como jugar a unir bloques pero llevado al siguiente nivel. Y eso mola mucho.
Google acaba de presentar el Proyecto Bloks. Una plataforma de hardware abierta destinada a ayudar a profesores a introducir los fundamentos de la programación a pequeños estudiantes ofreciendo una forma muy visual y táctil de aprendizaje.
Las diferentes piezas – llamadas Pucks – pueden conectarse unas con otras y sirven para indicar órdenes de movimiento, interruptores o sensores que activan o desactivan ciertas funciones. Incluso es posible realizar conexiones remotas mediante conexión wifi o Bluetooth.
Para que esto sea posible Bloks utiliza por el momento la Raspberry Pi como unidad central. Y es que para su reducido tamaño este mini-PC capaz de correr Linux parece no tener límite en las aplicaciones que puede ofrecer.