En un intento de mentalizar al autor del proyecto y llevarle a su verdadero papel de creador, vamos a describir lo que hemos denominado El Proceso Creativo.
Lo hacemos ahora con la intención de explicar este proceso, o método, antes de verter ideas de diseño con el fin de que cada uno vaya almacenando de forma ordenada lo que recibirá en las distintas explicaciones.
Lo hacemos también ahora pues en este tipo de proyectos, no se puede separar el proceso creativo del diseño de la redacción del proyecto, como venimos indicando desde el comienzo de la serie.
Otra cosa distinta es la edición del proyecto, de la que no hablamos, de momento.
El diseño esta presente en todo proceso creativo, y lo ha estado siempre, con mayor dedicación e intensidad cuanto mayor es el compromiso del usuario con el objeto diseñado, es decir cuanto más intensa y cercana vaya a ser su relación con el mismo.
Los parques y jardines son espacios de uso y relación y de experimentación de sensaciones que se pretenden beneficiosas, y por ello requieren un cuidado proceso de diseño de todos los elementos, en especial de aquellos que se entregan al uso directo. Debemos lograr el ansiado escenario donde el usuario reciba los impulsos necesarios del ambiente creado para que se convierta en actor y tener muy presente que en los parques y jardines es habitual encontrar personas dotadas de una alta sensibilidad por el entorno, en especial por los vegetales.
Pero además, hoy de los parques y jardines se espera mucho y tiene cabida casi todo. La oferta que pueden proporcionar es muy variada, ya lo hemos comentado.
En consecuencia, la carga de uso se ha elevado considerablemente así como la cantidad de factores que rodean o influyen en el diseño, pudiendo llegar a ser abrumadora, tanto como la responsabilidad derivada de lo que se ofrece. Con ello no pretendemos alarmar sino reconocer la importancia que tienen los parques y jardines y la decisiva, si se quiere absoluta, influencia del meditado diseño.
Ya hemos dicho que diseño y creación van unidos, siempre se diseña para crear, y toda creación parte de un pensamiento teórico.
Otra opción
El diseño de parques y jardines exige que el pensamiento teórico, la idea base del diseño, ya sea del todo o de una parte, sea inmediata o simultáneamente meditada y contrastada por el diseñador, es decir puesta a prueba por el propio autor del pensamiento recurriendo para ello a sus propios conocimientos y experiencia.El proceso atribuye al proyectista una cierta carga de conocimientos y experiencia sin los cuales no es fácil, yo diría posible, abordar un diseño. Ponemos en primer lugar los conocimientos, pues es en ellos donde radica la adopción de soluciones de diseño, trayendo al caso ideas que ha visto funcionar en ambientes parecidos, a partir de las cuales puede desarrollar todo un proceso de diseño. Incluso puede ensayar ideas opuestas a otras soluciones conocidas que se han mostrado ineficaces y que, por tanto, pueden resultar aquí. En segundo lugar ponemos la experiencia, pues la consideramos un arma peligrosa manejada inadecuadamente, que puede llevar a la repetición y no a ensayar soluciones nuevas, que es lo deseable y la verdadera labor de quien diseña. Ello no quiere decir que hayamos de prescindir de todo lo diseñado hasta ahora, bien al contrario, pero en cada caso con los matices y soluciones particularizadas al caso, que pueden ser muy pocas, pero las suficientes para que el diseño esté ajustado y sea fresco. Lo que nunca debemos hacer es la copia directa.