Una de las cosas en las que destacan generalmente los teléfonos de Google es en la calidad de las fotografías que se hacen con ellos. Hemos probado el Pixel 4a para conocer si esto también se cumple con un modelo que tiene un precio bastante ajustado y que se coloca como uno de los terminales más interesantes de la compañía norteamericana en la gama media de producto.
El hardware que se incluye en el interior es bastante conocido y mantiene una de las características que son habituales en los despóticos de la firma de Mountain View: no utilizar una gran cantidad de sensores. Tanto es así que la elección como se ve en la ficha del Pixel 4a es un único elemento que tiene una resolución de 12,2 megapíxeles ... un viejo conocido. Algunos detalles que son importantes de este hardware es que tiene una apertura de F:1.7 y que tiene un campo de visión de 27 milímetros. Un buen componente no hay duda que, además, es tipo Dual Pixel.
La aplicación que incluye el terminal es la habitual que utiliza Google en Android, que tiene virtudes como la sencillez de uso y que realiza un procesador que es muy beneficioso y que suma y no resta. A destacar que cuenta con el Modo Exposición Dual que permite el control de algunos parámetros al hacer una foto (pero sin llegar a ser comparable con los modos profesionales de otras formas). También incluye Live HDR+ que aprovecha de forma excelente las hasta 15 tomas por foto combinadas que se dan uso en la mejora de la que hablamos.
Calidad de las fotos que se hacen con Pixel 4a
La verdad es que los resultados son bastante buenos en todo tipo de situaciones y la combinación hardware y software es excelente. Con una fiabilidad de los colores excelente, algo en lo que influye una estupenda gestión del contraste, los detalles son muy buenos y no sufres en exceso son las tomas muy claras lo que habla bien del balance de blancos. Además, el HDR+ utilizado es realmente bueno, y en situaciones no muy favorables muestra un desempeño genial que no hace que aparezca ruido ... la verdad es que muy bien este smartphone en líneas generales.
Con el zoom hasta 2X no se comporta especialmente mal, pero aparecen algunos detalles poco reales que demuestran que el software es importante para que se pueda trabajar de esta forma ya que no se incluye un sensor que ayuda a esto... por lo que un añadido en este apartado hubiera sido una buena idea. Dejamos a continuación algunos ejemplos de lo que es posible conseguir con el Pixel 4a:
Algunos detalles concretos en diferentes tipos de tomas es que en las tomas nocturnas se consiguen resultados excelentes ya que se trabaja muy bien para conseguir luz donde aparentemente no la hay... aunque al generar sombras en ocasiones comete algunos pequeños errores. En los retratos con desenfoque los resultados son excelentes, con todo tipo de luminosidad y complicaciones, sin duda alguna aquí es de lo mejor de la gama media que hemos visto hasta la fecha.
Hay que mencionar que la cámara para los selfies, que es de 8 MP (con focal F:/2.0), se comporta bastante bien en diferentes situaciones con un rango dinámico que está bastante bien pero que no es precisamente brutal. Los desenfoques, eso sí, excelentes como ya es norma en la gama Pixel de Google.
Grabación de vídeo, sin muchos fallos
La calidad máxima que permite el Pixel 4a es 4K a 30 FPS, pero nos han gustado mucho más los que se consiguen a 1080p que llegan a los 60 FPS. Se comporta bastante bien con un enfoque automático rápido y con una buena gestión de la luminosidad. Eso sí, la estabilidad no es la mejor del segmento en el que se ubica el dispositivo, pero esto es algo que no se hace notar en exceso y por lo tanto se cumple sin problemas.