Un equipo de investigadores de la Escuela de Medicina de la
Universidad de Washington en St. Louis y el Centro Internacional para la
Investigación de Enfermedades Diarreicas en Dhaka, Bangladesh, se centró en
potenciar de forma selectiva los microbios intestinales que promueven el
crecimiento, utilizando ingredientes presentes en alimentos asequibles y
culturalmente aceptables. La investigación que se describe en dos informes publicados
hoy en la revista Science incluyó a niños, con diagnóstico agudo de desnutrición.
Los niños fueron asignados al azar a cuatro grupos de tratamiento, tres de los
grupos recibieron alimentos terapéuticos de nuevo diseño, mientras y los del
cuarto grupo recibieron un alimento terapéutico estándar que no fue diseñado en
función de sus efectos en el microbioma intestinal. Uno de los alimentos
terapéuticos se destacó del resto, la medición de las proteínas sanguíneas,
involucradas en el crecimiento óseo, el desarrollo del cerebro, la función
inmunológica y el metabolismo en diversos tejidos, reveló que este prototipo de
alimentos había producido un cambio pronunciado hacia un estado saludable en
comparación con lo que se observó en los otros Al final del estudio, los
investigadores también encontraron que, a diferencia de los otros tres grupos
de tratamiento, las comunidades microbianas intestinales que residen en los
intestinos de los niños que reciben este alimento terapéutico se habían
reconfigurado y se parecían más a las comunidades microbianas encontradas niños
sanos que viven en la misma localidad. Esta formulación contenía, entre otros
componentes, una mezcla de nutrientes de garbanzos, soja, plátanos y cacahuetes.