Se trata de una torre cuya fachada la conforman unas piezas hexagonales que se pueden mover para graduar la cantidad de luz natural que entra y a su vez reducir el gasto de energía eléctrica.
Visualmente, este proyecto se basa en la esencia de las antiguas técnicas de construcción de China, las cuales se adaptan al clima y a la luz.En ella habrá apartamentos y oficinas, además de un espacio para el arte y un restaurante en su planta baja
Desde luego les ha salido una buena competencia al resto de rascacielos de la zona!Visto en: Dezeen
