Psicología: una carretera que se convierte en arte al llover

En Seúl han presentado un proyecto realmente original que combina el arte con la psicología. ¿En qué consiste? En un tipo de pintura que sólo aparece cuando se moja.

Durante tres semanas, cada año la ciudad, de Seúl se transforma: los monzones arrasan todo, el ambiente se vuelve gris y poco alegre con calles desoladas, oscuras y apagadas. Para remediar esta situación tan deprimente, del equipo colectivo D&AD se ha propuesto dar color a las calles de la capital de Corea del Sur con una pintura especial que aparece sólo en contacto con el agua. La idea es adornar las calles con esta pintura para que cuando llueva salgan a la vista y la gente deje de estar triste y deprimida por el día gris pudiendo ver estas calles llenas de color.  No es de extrañar esta iniciativa con la cantidad de casos de depresión que tienen en Seúl durante las lluvias del Monzón que año tras año golpean las calles de la ciudad. Si clicáis sobre el enlace podréis ver el artículo entero y más fotografías de este proyecto. No se puede cambiar el clima, pero sí las calles de la ciudad. Eso es lo que ha pretendido conseguir el artista del grupo D&AD pintando las calles de forma que sólo se pueden ver las obras los días que llueve. Así se aporta un poco de color en los días grises y tristes para alegrar las caras de las personas. En Seúl, la estación de los monzones se combate con arte de la calle, gracias a este Proyecto Monzón (#ProjectMonsoon), un proyecto que reunió en la misma mesa a un grupo de artistas de Corea del Sur y el mismo rey del color de Pantone. Prácticamente cada vez que llueve, el asfalto empezaría a llenarse de manchas de color que dan forma a colores y ambientes divertidos. El resultado es lo que se ve en las fotos que os hemos dejado. Aunque hay que decir que estas son las fotos del proyecto que reproduce cómo quedarían las calles con el Proyecto Monzón, pero aún deben aprobarlo y hacerlo. La idea del arte de la calle que pretende cambiar la percepción de la estación de los monzones y atraer a los habitantes a reunirse con mucha más alegría y buen humor es parte también  la temporada de lluvias en un momento triste, pero para dar un nuevo positivo, por supuesto, gracias al color. Juegan con colores vivos y llamativos para lograr este efecto en la gente. Desde el color azul claro al amarillo, de rojo a verde, de naranja a púrpura, el enfoque parece ser la de una gama de colores para niños e incluso el diseño de las imágenes que se reproducen son simples y lineales. Por ejemplo podemos ver tortugas, ballenas y peces. Igual que los dibujos infantiles. Todo pensado para aportar alegría y felicidad. Sólo queda esperar la decisión final de Seúl imaginando los días de lluvia llenos de vida y color.