Revista Cultura y Ocio
Música de Enya, un Bordeaux francés y una biblioteca repleta de clásicos. Entre ellos figuraba Homero, Edgar Allan Poe y Jane Austen con “Orgullo y Prejuicio”. Angie había preparado a conciencia tal romántico escenario, con el fin de dilucidar los misterios del pasado oscuro que nuevamente había sido frustrado por la psiquis. Cansancio, esperanza, odio, estupidez, se mezclaban en un único sentimiento. El vuelo desde Amsterdam llegaba con retraso a Barajas, las condiciones meteorológicas impidieron la salida del Boeing 787 a su hora en punto. Angie recogió a Marcel tras un tímido abrazo amistoso y se dirigieron a su casa de Madrid en la calle preciados. El camino a casa fue silencioso, sin apenas temas de conversación, simplemente alusiones a la espera, a la tempestad que hizo sufrir el retraso y poco más. Angie lucía un aspecto juvenil, resalte de maquillaje en sus lindos ojos verdes y haciendo acopio de su estilo...