Publicidad verde engañosa

Últimamente se está dando mucho cierto fenómeno en la publicidad al que se suman muchas empresas. Se trata de intentar hacernos creer a los consumidores que su empresa vende productos verdes cuando en realidad no lo son. Pero saben que tras la vorágine de marcas, etiquetas, certificaciones etc el consumidor suele estar confuso y una publicidad cargada de cierto “tinte verde” hará que el subconsciente del consumidor se decante por este tipo de productos.

Una vez más se nos pone a prueba y no debemos quedarnos con las bonitas imágenes de paisajes, naturaleza o palabras como eco, sostenible, verde, natural… tenemos que ir más allá y cerciorarnos de lo que estamos comprando, y ¿cómo? pues leyendo bien todo el etiquetaje, los componentes de los productos que vayamos a comprar y comprobar que los sellos son certificadores de la calidad natural de ese producto. Y sino… preguntar o investigar.

Las empresas saben que cada vez más lo verde vende pero antes de hacer realmente un cambio en sus políticas de medio ambiente la mayoría nos lanzan estos engañosos cebos simplemente para seguir ganando dinero y dar una buena imagen por fuera de su empresa al consumidor.

Así que no podemos dejarnos engañar, si no estamos seguros de lo que se nos está ofreciendo hay que buscar información antes de comprarlo. El sentido común también será un buen aliado, por ejemplo esas grandes superficies que se suman al carro de la eliminación de las bolsas de plástico no proporcionándoselas  al consumidor junto con su compra, pero que acto seguido te preguntan si quieres bolsa y te la cobran, está claro que nos intentan ofrecer una moral medioambiental de la que carecen. A este tipo de engaños es fácil negarse, pero lo cierto es que hay que ir con los ojos bien abiertos a la hora de hacer nuestras compras.

Os pongo un bochornoso ejemplo de tantos que utilizan estas tácticas subestimando nuestra inteligencia.