¿pudo la ciencia probar un milagro de san francisco de asís?

Las leyendas, mitos y relatos fantásticos son la base de la literatura y del folclore de toda la raza humana.  Esto está especialmente arraigado cuando vemos que las más grandes religiones del mundo tienen muchos de estos relatos entre su literatura y tradición oral.  Muchas de estas historias no han podido ser ni probadas ni desmentidas.  

Una de las tantas historias es el relato de un milagro atribuido al famoso Francisco de Asís, el santo habría salvado la vida de un monasterio completo en Italia, mientras él seguía en Francia.  Esta historia no sólo es genial e impactante, sino que da pie a investigación científica, lo que encontró te va a dejar con la mandíbula pegada al suelo. 

Un milagro de San Francisco de Asís ha tenido un encuentro cercano con la ciencia

Pan de Francia

La historia va de la siguiente forma.  Es 1224 y en el norte de Italia, el monasterio de Folloni la está pasando bastante mal.  Los monjes se han quedado aislados detrás de una pared de nieve de dos metros que los deja a su suerte en lo alto de su pequeña colina.  Pronto, como es de imaginarse, las provisiones se acabaron.  

En este monasterio ocurrió el supuesto milagro de la historia

Pero una noche se oye que llaman a la puerta, los monjes, atemorizados porque nadie podría haber llegado hasta allí sin morir una muerte horrible, salen a ver quién es.  A la puerta no hay nadie, sólo un gran saco con pan.  El saco tiene el sello de la Flor de Lis, viene desde Francia.  El pan, fresco y recién hecho, alcanza para que los monjes no mueran de hambre durante el invierno.  

Con ciencia

La historia es increíble, pero parece ser simple ficción.  Los monjes en Folloni le adjudicaron el milagro a San Francisco de Asís, quién ese invierno estaba al Sur de Francia, de donde procedía el pan.  Un equipo de científicos daneses viajó el año pasado a Folloni, donde aún conservan el saco donde llegó el misterioso pan.  

Sin embargo no podemos explicar cómo llegó este pan recién horneado a Folloni

Le hicieron pruebas con radiocarbono, estas dataron el saco a 1224, y encontraron trazas de pan dentro, con levadura que debió de estar fresca al momento de adherirse al saco.  Además, las hebras para hacer el saco vienen de plantas provenientes del Sur de Francia. Las trazas de proteína de pan muestran que debió hornearse en el invierno de ese año.  El asunto de cómo llegó el pan hasta Folloni es otra cosa muy aparte, era una época en la que los imperecederos no existían, y aún el pan llegó fresco hasta Italia, los daneses cierran el caso diciendo que la respuesta a esta pregunta es más un “asunto de fé y no de ciencia”.  Comenta y comparte. 
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