El Servicio Público de Empleo Estatal (SEPE) lo deja bastante claro, y es que por el hecho de estar estudiando o tener hijos menores no son causas que justifiquen el rechazo de una oferta de empleo o cursos de formación mientras se está en paro y se está cobrando una prestación.
Si eres una persona que se encuentra en situación de desempleo o cobrando una prestación tienes que tener un compromiso de aceptar ofertas de empleo que se te planten.
Infracción grave
Por eso, el rechazo de una oferta de empleo, que esté acorde a su preparación profesional, o de un curso de formación sin un motivo que lo justifique está considerado como "infracción grave" y conllevará consecuencias para los solicitantes de esta prestación.
Dicha falta se sanciona con la pérdida de la prestación durante tres meses la primera vez; seis meses si se reincide una segunda vez, y con la extinción de la prestación si hay una tercera vez.
Una búsqueda activa de empleo
Insisten en que es obligatorio justificar la búsqueda activa de empleo y la participación en las acciones de mejora de la ocupabilidad que se correspondan con su profesión habitual o sus aptitudes formativas, según lo determinado en el itinerario de inserción.
No obstante, será voluntaria para las personas beneficiarias de prestaciones contributivas durante los treinta primeros días de percepción, y la no participación en las mismas, no conllevará sanción.
En estos casos, en vez de producirse una sanción grave por el hecho de tener que cuidar a tus hijos, se podría ofertar otro tipo de ofertas de empleo que te permitan conciliar.