El prófugo de la justicia española, Carles Puigdemont, intentó acreditarse en el Parlamento Europeo, fue rechazado por la organización con sede en Bruselas, debido que Puigdemont tiene que ser acreditado por el pais donde salio electo como diputado, es decir España, Por esta razon es loable la decisión del Parlamento Europeo de no aceptar a un golpista que debería estar en la cárcel por delitos agravantes de traición a la patria, ademas de no tener ningún tipo de moral para desempeñar tan importante cargo dentro de un continente tan respetable como es Europa.
No se podía repetir la historia con respecto a la apertura del parlamento de España de este año, donde los golpista súbitos de Puigdemont se juramentaron como diputados, mancillando asi el ordenamiento jurídico español, en consecuencia el Parlamento Europeo si hizo respetar las leyes y no permitió que una persona que ha cometidos desafueros contra uno de los países miembros de su organización, el honor de la institucionalizad quedó en evidencia, no marco un precedente lamentable de tener entre sus filas a semejante delincuente.
Puigdemont no quiere pisar suelo español, lo que hizo fue muy agrave, no quiere darle la cara a la justicia, por la razon que a sus compañeros golpistas que se encuentra en territorio español, la fiscalia estan solicitando una pena de 25 años de prisión, la posibilidad de tener inmunidad parlamentaria para tapar sus tropelías al igual que lo quiere hacer Carles, no le estan dando resultados, en consecuencia la justicia de España no permitirá que el agravio del mes de septiembre del 2017 quede impune, por esta razon prevalece el sentido común que dicta que cuando un ciudadano comete un delito obviamente tiene que ir a la cárcel.
Gracias a la democracias y a la separación de poderes en España, en especial al poder judicial, por respectar el Estado de derecho con respecto a los golpistas de Cataluña, ademas de no permitirles que tenga fueros parlamentarios, porque si estas decisiones la tomara el actual gobierno presidencial, los golpistas estarían muy alegre y cumplirían todos sus objetivos de soslayar el ordenamiento jurídico, el actual inquilino del palacio de la Moncloa Pedro Sánchez ha dado muestras de su gran oportunismo, como es obvio necesita sus votos para el acto de investidura sin importar que el ex presidente de la Generalidad de Cataluña es un delincuente, pero Gracias a Dios, la justicia triunfará sin importar la opinión del presidente, en fin Pugdemont out.