
La banda venía con un cierto impulso gracias al disco “Intro. The Gift Recordings”, considerado como un recopilatorio de singles del periodo 1992-1993, parecido a lo que The Cure hizo una década atrás con “Japanese Whispers”. Gracias al trabajo potente de singles como “Babies”, “Razzmatazz” o “OU”, parecía que por fin el quinteto ya afianzado con Candida Doyle, Nick Banks, Steve Mackey, Russell Senior y Jarvis Cocker, cogían vuelo.
La cosa se vino a confirmar con el disco de 1994 que hoy nos ocupa. “His ‘N’ Hers” tiene ya hechuras de disco grande. Por fin se ve un producto bien rematado, más allá de buenas ideas que ya se planteaban en discos como “Freaks”, pero que no terminaban de pulirse adecuadamente.
ANÁLISIS DEL DISCO.1. “Joyriders”: Curiosamente el disco no pretende entrar con una patada en la puerta. “Joyriders” es una canción con cierta discreción en sus formas. Una especie de bienvenida de buen sonido, pero que quedará parcialmente en el olvido con todo lo potente que nos iremos encontrando. Destacan mucho dentro de la melodía los acordes de guitarra acústica. Vemos a Jarvis en un registro vocal grave y profundo. Correcto arranque.
2. “Lipgloss”: Llegamos a un capítulo destacado. Single potente y a ratos mi canción favorita. “Lipgloss” suena dramática, transcendental, acelerada y definitivamente pop. Un single efectivo, con un videoclip algo psicodélico y mareante, que trabajó bien. Jarvis sabe moverse muy bien entre los tonos más graves para las estrofas y los más altos en el estribillo. Dentro de la parte instrumental, las delirantes notas de los teclados de Candida son las que más claramente acaparan el protagonismo.
3. “Acrylic afternoons”: Canción obsesiva “Acrylic afternoons”, con unas estrofas narradas, muy marca de la casa de Jarvis Cocker, y un estribillo arrebatador, transcendental y casi épico. Muy buen trabajo de los sintes de Candida nuevamente en una pieza que es perfectamente reconocible dentro del estilo de la banda y que de hecho podría haber encajado perfectamente en el anterior disco “Intro. The Gift Recordings”.
4. “Have you seen her lately?”: Con “Have you seen her lately?” vemos quizás la pieza de melodía más dolida y sentimental, sobre todo en lo referente al su estribillo. Bien ensartada dentro del conjunto del álbum, es una de las piezas que, sin ser single, quizás son mejor recordadas por los seguidores de Pulp. Suma al conjunto.
5. “Babies”: Estamos ante un caso de “morrazo” que diría nuestro amigo Alfredo Morales, ya que “Babies” ya había sido utilizada en el anterior disco “Intro. The Gift Recordings” y como single mucho tiempo atrás de la edición del álbum. Cierto es que la canción se regrabó y suena ligeramente distinta, pero no hay cambios radicales sobre una pieza que ya de por sí es magnífica y que se puede considerar el primer gran single de Pulp. La historia de las hermanas gemelas y el novio de una que se lía con la otra es atinada y la melodía es fabulosa, con un estribillo en in crescendo y una banda que desprendía ganas, energía y emoción. Fabulosa.
6. “She’s a lady”: Siempre en los discos de Pulp hay espacio para canciones atormentadas y obsesivas, que permiten a Jarvis ofrecernos una interpretación vocal muy teatral. Es el caso de “She’s a lady”, con un sonido inquietante y profundo, que nos lleva a un curioso equilibrio entre la exageración y la contención. Buen trabajo instrumental también en una canción que tiene una fuerte personalidad.

8. “Do you remember the first time?”: Estamos ante el gran single del disco. “Lipgloss” es efectiva, pero por la letra y su contenido tan universal, “Do you remember the first time?” fue la canción que permitió a Pulp hacerse un hueco en el panorama británico y por ende internacional en unos días en los que no era nada fácil meterse en ese panorama dominado por los debutantes Oasis y los Blur en fase de consolidación. Buen estribillo, con un videoclip de interesantes movimientos de cámara. Es una composición con un tremendo gancho desde su primer verso y que funciona muy bien en su registro algo exagerado. La teatralidad de Jarvis no chirría con el enfoque claramente pop, consiguiendo una mezcla perfecta de las 2 vertientes. Canción genuina de Pulp, de las que mejor podrían definir por sí solas a la banda.
9. “Pink glove”: Con “Pink glove” nos encontramos con una pieza pop perfectamente ensamblada dentro del conjunto del disco. Es lo que podríamos denominar como un buen jugador de equipo, es decir, que sin ser la estrella, suma mucho al global (algo como actualmente Giuliano Simeone en el Atlético de Madrid 2024/2025). Tiene un buen estribillo, con una melodía arrebatadora y sin ser la canción que más se te quede en la retina, sí que resulta agradable encontrarte con ella. Un resultado el de esta canción que no es fácil y más teniendo en cuenta a la compañera que sucede en el orden del lp.
10. “Someone like the moon”: Sin lugar a dudas la pista más ambiciosa y quizás por ello la menos accesible del álbum es “Someone like the moon”. Tiene cierto enfoque misterioso y nocturno (más allá de la evidencia de citarse a la Luna). Los arreglos como de cuerda le confieren elegancia y Jarvis canta en un registro también que se sale de los parámetros en los que suele modularse frente al micrófono.
11. “David’s last summer”: Después del momento onírico de “Someone like the moon” llegamos al brío melódico de “David’s last summer”, que sin embargo contrasta mucho con el tono grave y sombrío narrativo de las estrofas que aplica Jarvis. El estribillo, sin ser de relumbrón, funciona bien y contrasta lo justo entre lo cantado y narrado; de hecho, este estribillo es de lo más luminoso en general del disco. Curiosamente. Correcto cierre, con mucho ritmo de base y movimiento instrumental. A pesar de su duración de 7 minutos, al menos a mí no se me hace larga.
RESULTADO, CONCLUSIONES Y REFLEXIONES.Con este disco de portada llamativa con esa fotografía de los componentes de la banda algo retocada, Pulp lograron por fin el éxito masivo que tanto tiempo llevaba ansiando y buscando su líder y cantante Jarvis Cocker. La producción, composición instrumental y creación lírica, se alinean en perfección dando lugar a un disco mayúsculo y sobresaliente.
No hay quejas. El conjunto de temas funciona muy bien. Las emociones se distribuyen correctamente a lo largo de su duración (el orden de temas creo que es acertado, bastante acertado). El éxito fue general, gracias a singles efectivos y que lograron un buen alcance y de hecho creo que no hubiera hecho falta meter a “Babies” en el conjunto para que el disco ganara peso; a pesar de que creo que es una canción formidable de Pulp, me da la sensación cuando escucho mi cd que es como un postizo en la obra.
El grupo mantuvo una inercia de excelencia durante 3 años más. Los 2 siguientes discos son brutales. “Different Class” es sencillamente uno de los mejores discos de la historia de la música moderna y fue masivo. “This Is Hardcore” si cabe es más brillante, pero al ser menos inmediato, no tuvo tanta aceptación.
“His ‘N’ Hers” marca ya la confirmación de Pulp y viene a refrendar el buen desempeño de los 2 años anteriores. Es un disco además que viene a representar muy bien el sonido del pop británico de aquel 1994 y puede competir en buenos pulsos con “Definitely Maybe” de Oasis y con “Parklife” de Blur, pudiendo ganar dependiendo del día y del gusto/ánimo de cada uno.